El Ibex 35 cierra casi plano pese a la banca
El sector bancario vuelve a ser un lastre para el Ibex 35, igual que sucedió toda la semana pasada. Las posibles decisiones sobre política económica y monetaria del Banco Central Europeo (BCE) dañan mucho a los bancos españoles y al Ibex 35.
El principal indicador de la Bolsa española, el Ibex 35, ha caído hoy un 0,08%, hasta los 9.136,5 puntos, en una jornada marcada por las tensiones entre Estados Unidos e Irán y un posible acercamiento en la guerra comercial. Pero el Ibex 35 no se ha fijado en estas dos cuestiones sino en la reunión del Banco Central Europeo (BCE) del próximo jueves.
El Ibex 35, al igual que el resto de indicadores del Viejo Continente o la apertura en Nueva York, comenzó la sesión con muy poco fuelle y movimiento. La calma y la cautela marcaban el ritmo de los parqués a la espera del chorreo incesante de resultados de grandes compañías que comienza mañana (recordar que esta es la penúltima semana de presentación de resultados) y los inversores no realizaban grandes movimientos.
Y así se ha mantenido la mayoría de la jornada, con las compras como protagonistas, salvo para el Ibex 35. Y es que la fuerza vendedora atacó por enésima vez al sector bancario español, que no levanta cabeza. Los inversores ahora la mirada en la reunión del BCE. El mercado espera que el organismo de el paso definitivo para una política económica aún más acomodaticia. Dentro de este marco, que podría comenzar en septiembre, aparecerían compras netas de activos de hasta 15.000 millones de euros o una rebaja de 10 puntos básicos, hasta el 0,5%, en la tasa a de depósitos a los bancos.
Con la rumorología y los indicadores macroeconómicos de la mano, más la rebaja en el precio del dinero de la Reserva Federal de Estados Unidos (Fed) para el 31 de julio que se da ya por segura, muchas son las voces del mercado que especulan con una bajada de los tipos de interés para este mismo jueves. Bajar los tipos, hasta el -0,10% supondría llevarlos a negativo por primera vez en la historia.
Este cóctel, cuya base es buscar el crecimiento de economías estancadas como la alemana o la Italiana, es dinamita pura para el sector bancario español cuyas cuentas están muy mermadas y les cuesta encontrar rentabilidad con la actual política del BCE.
Así, las mayores caídas del día en el Ibex 35 han sido para Bankia, que ha caído un 4,05%; Bankinter, un 3,9%; Sabadell, un 3,7%; Merlín, un 1,29%, y Mapfre, un 1,17%. Del resto de la banca del Ibex, CaixaBank ha perdido un 0,75%; BBVA, un 0,74%, y Santander un 0,35%. Mientras que en el lado de las ganancias se han colocado ArcelorMittal, ascenso del 2,34%; Grifols, un 2,06%; Amadeus, un 1,83%, y Acciona y Ferrovial, un 1,12% ambas.
Mañana, precisamente, comienza la presentación de resultados de la banca con Santander, que también celebrará junta de accionistas. Además, darán a conocer sus cuentas Endesa y Cie Automotive.
En el resto del Viejo Continente los ascensos los ha encabezado Milán, con una subida del 0,44%; París, un 0,26%; Fráncfort, un 0,24%, y Londres, un 0,08%.
Doble visión de la guerra comercial y tensiones entre EE.UU e Irán
Por un lado se ha conocido que las reuniones entre China y Estados Unidos podrían comenzar pronto y que Pekín estaría dispuesto a impulsar un plan para potenciar las compras de semillas de soja a Estados Unidos, una de las peticiones expresas de Trump. Aunque por otro lado, el gigante asiático ha impuesto medidas proteccionistas a productos de acero inoxidable que lleguen desde la Unión Europea, Corea del Sur, Japón e Indonesia. Aunque, claro está, Estados Unidos no está en esta contienda.
La tensión entre Estados Unidos e Irán comienza se aleja de lo deseable para unas relaciones internacionales calmadas y sin temores a escenarios conflictivos. La inteligencia iraní ha anunciado que el arresto de 17 personas y las acusado de trabajar para la CIA estadounidense en Irán en sectores "sensibles" como la energía nuclear. El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, no ha tardado en declarar que estos hechos son mentira y propaganda, como el dron derribado, y que Irán posee una economía muerta que empeorará mucho más: "Irán es un desastre total", declaró Trump.
A esto se une la captura de un petrolero británico en el estrecho de Ormuz por parte del ejército iraní. La conjunción de ambas situaciones convierte en un polvorín a una zona geopolítica clave y fundamental para el transporte de crudo.
Así, el barril de crudo de Brent, de referencia para Europa, subía un 1,23% y se pagaba a 63,23 dólares, con los mercados europeos cerrados, y el barril de West Texas, de órbita estadounidense, ascendía un 0,75% hasta los 56,05 dólares en ese mismo momento.
La moneda comunitaria, el euro, se cambiaba por 1,121 unidades de dólar, cotizaba plana, y la onza de oro valía 1.426 dólares.
De vuelta a España, y con la dificultad de nombrar mañana a Pedro Sánchez como presidente del Gobierno por la negociaciones entre el PSOE y Unidas Podemos, la prima de riesgo española se coloca en 75 puntos básicos con la rentabilidad del bono español a diez años en el 0,384%.
Atención mañana a Reino Unido puesto que es previsible que el euroescéptico Boris Johnson, exalcalde de Londres y exministro de Exteriores, sea elegido por el Partido Conservador como sustituto de Theresa May. Su elección, según sus propias palabras, traerá una desconexión con Bruselas el 31 de octubre "sea como sea". Es decir, aunque no haya acuerdo. Habrá que comprobar la reacción de los mercados.