China paga la represión: la industria se contrae por primera vez desde que estalló la pandemia
La cruzada de represión en la que se embarcó el gobierno de China, junto con la escasez de energía, noquea a la industria manufacturera., según mostró el PMI
La cruzada represora en la que se embarcó el gobierno de China en su afán de controlar todas las actividades productivas está dando sus primeros frutos negativos. La industria manufacturera se contrajo en septiembre por primera vez desde que estalló la pandemia del coronavirus.
En concreto, el índice de gerentes de compras, conocido como PMI, se contrajo hasta los 49,6 puntos en septiembre, frente a los 50,1 puntos que marcó en agosto.
Este es el indicador oficial que elabora la Oficina Nacional de Estadística (ONE) y cualquier lectura por debajo de los 50 puntos ya indica contracción de la actividad.
Además, el índice extraoficial que publica Caixin y que elabora la consultora británica IHS Markit se quedó justo en el filo de los 50 puntos.
Los riesgos para el crecimiento de China se multiplican
Los datos recién desvelados reflejan muchas derivadas preocupantes, desde el daño que está causando al crecimiento la escasez generalizada de electricidad, hasta los problemas del sector inmobiliario, con Evergrande al borde del colapso y del impago de sus bonos.
La escasez de electricidad, que ha provocado cortes de luz en toda China esta semana, junto con las restricciones a la propiedad son "un doble golpe para los principales motores del crecimiento este año", dijo Bo Zhuang, economista de China en Loomis Sayles Investments.
Ni siquiera las voces oficiales del régimen se esforzaron por maquillar el problema. “Sufrieron las industrias de elevado consumo energético” en un momento en que diversas zonas de China están afectadas por los cortes de electricidad, dijo Zhao Qinghe, analista de la ONE.
La situación es preocupante porque todos los subíndices del PMI se colocaron en terreno de contracción. La ONE explicó la coyuntura por los altos precios del carbón y la subida de las materias primas.
Perspectivas muy inciertas a corto plazo
En su afán por reducir el consumo energético, el gobierno chino desplegó su actividad represora contra el bitcoin y el resto de criptodivisas, en un movimiento de represión histórico que acabó con la prohibición de estos activos digitales.
El problema es que la situación se ha vuelto tan preocupante que harán falta más medidas para evitar los peores escenarios.
“El apoyo político adicional tendrá que llegar pronto para evitar una fuerte desaceleración del crecimiento”, dijeron los analistas de Bloomberg Intelligence. Las perspectivas de la economía a corto plazo son muy difíciles e inciertas.
A la escasez de energía hay que sumar la debilidad de la demanda externa o el endurecimiento de las normativas con muchas industrias, en especial para las compañías tecnológicas o el sector salud.