Bitcoin: mucha subida, poca rentabilidad

Con el bitcoin puede pasar como con el mítico fondo Magellan de Fidelity, gestionado en la década de los 80 por Peter Lynch, que se convirtió en una leyenda de Wall Street. 

Durante los más de 13 años que estuvo al frente del fondo, Lynch consiguió una rentabilidad anualizada del 30 por ciento, un porcentaje impresionante, pero del que no pudieron disfrutar una buena parte de los inversores que entraron en el fondo, que acabaron con pérdidas. 

La causa fue que la mayoría de participes entraban cuando el fondo estaba en un nivel bastante elevado. Si llegaba una corrección, perdían los nervios y  no respetaban el horizonte temporal a largo plazo que debe regir una inversión y vendían en plena caída, sin esperar a una recuperación que siempre llegaba. 

Pocos inversores reconocen haber ganado

Con el bitcoin está sucediendo algo similar. Pocos inversores reconocen haber ganado, a pesar de que la criptomoneda ha estado esta semana rondando la barrera de los 70.000 dólares. 

Avalancha de inversores han entrado con el objetivo de obtener grandes ganancias en un corto plazo de tiempo. Muchos de ellos sin los conocimientos necesarios para afrontar una inversión de esta dimensión. 

Y aunque es cierto que la subida del bitcoin es espectacular, sus recortes también lo han sido. Por ejemplo, los que el 25 de octubre entraron en el bitcoin a 54.000 dólares se encontraron con que dos días después caía hasta los 50.000 dólares. 4.000 dólares borrados de un plumazo. 

Nervios de acero y paciencia con las caídas

Hay que tener nervios de acero y mucha paciencia para aguantar tanta presión, unos descensos tan verticales como los que ha tenido el bitcoin.

En ese escenario el inversor suele ponerse en lo peor, en que va a seguir bajando hasta límites insoportables, y prefiere saltar del barco y salvar lo que quede del naufragio. 

Lo que se presentaba inicialmente como una inversión muy rentable, al primer revés acababa en decepción.

Pero lo que ha dejado claro el bitcoin en estos años es que a largo plazo es fiable. A pesar de las críticas que ha recibido, de las dudas que ha generado, siempre ha remontado el vuelo después de los desplomes.  

Es posible que haya pasado lo más duro y está cerca de los 70.000 dólares. Los que hace poco anunciaban que era muy posible que alcanzara los 100.000 dólares no se equivocaban.

Tim Cook también invierte en criptodivisas

Y ahora acaba de recibir el respaldo de Tim Cook, el CEO de Apple, que ha reconocido que invierte en criptomonedas, aunque a título personal. Y lo argumenta con que es razonable contar con estos activos en una cartera diversificada. 

Tras la aprobación de los ETF sobre el bitcoin, si los grandes CEO de Wall Street admiten, poco a poco, estar invertidos en criptoactivos, el recorrido hacia los 100.000 dólares puede quedar despejado.