La vuelta al redil de Alibaba en China tiene premio
Alibaba avanza en la reestructuración de su división financiera después de limar asperezas con el Gobierno chino
Alibaba volvió en 2021 al redil de las autoridades chinas tras un 2020 donde pagó sus intentos de contradecir al Gobierno de Xi Jinping, y su renovada obediencia se ve ahora recompensada a través del apoyo estatal a su división financiera, Ant Group.
Lejos quedan los momentos de discordia en que Beijing paralizó los planes de Ant Group de protagonizar la mayor salida a bolsa de la historia, preocupados como estaban desde la capital china por el riesgo que planteaba para el rígido sistema financiero del país la oferta pública de venta de una fintech que podría facilitar las líneas de créditos a la clase media.
Desde el centro de mando de la nación se obligó a Ant a proyectar una reestructuración bajo un modelo de holding financiero más parecido al de un banco, con la consecuente implicación de que sus negocios estarían sujetos a más restricciones de capital.
Y este proceso avanza ahora con paso firme gracias al papel del Estado. La agencia de calificación crediticia, Fitch, explica que, en la actualidad, la reestructuración de Ant evoluciona favorablemente gracias a la entrada en escena de una empresa estatal china.
China saca la cartera para meter mano en Alibaba
"La reestructuración de Ant Group avanzó a través de una empresa estatal china que inyectó capital y elevó su participación en la división de Ant para la financiación al consumo, Chongqing Ant Consumer Finance Co (CACF)", afirma Fitch.
La agencia de calificación crediticia considera que "la mayor participación del gobierno a través de esta empresa le dará una mayor influencia y supervisión en los negocios de CACF" gracias a su capacidad de nombrar miembros del consejo de administración.
El nombramiento de estos miembros del consejo y el marcaje en corto a CACF facilitará, por tanto, los próximos pasos de la compañía: el lanzamiento de una empresa de informes de crédito personal y la constitución de un holding financiero.
La empresa gracias a la que Beijing mantendrá un mayor control sobre la división de financiación al consumo de Alibaba es China Cinda, un banco estatal que el 24 de diciembre informó a la Bolsa de Hong Kong de una operación gracias a la que pasará a controlar un 24 por ciento de CACF.
Una ampliación de capital que expande la capacidad de Ant
De acuerdo al comunicado de China Cinda remitido a la Bolsa de Hong Kong, CACF verá su capital aumentado hasta aproximadamente los 4.174 millones de euros, casi 3.000 millones de euros más que los 1.100 millones con los que contaba hasta esta ampliación.
China Cinda invertirá cerca de 83,5 millones de euros en esta operación para ampliar su participación en CACF hasta el 24 por ciento, convirtiéndose así en el segundo accionista de una compañía, tan solo por detrás del propio Ant Group, que continuará controlando un 50 por ciento de su división de financiación al consumo.
Gran parte del mayor porcentaje adquirido por el Estado chino a través de China Cinda, además, sale de la desinversión realizada por el banco saudí NCB, que reducirá su participación en CACF del 15 por ciento hasta el 4 por ciento.
El mensaje de China a su sistema empresarial, por tanto, es claro, Ant Group podrá brillar bajo su amparo, después de dar salida al capital extranjero.
"Después de la ampliación de capital, CACF podrá ofrecer hasta 300.000 millones de yuanes (41.174 millones de euros) en microcréditos en línea, partiendo de la base de 10 veces su capital registrado", señala Fitch.
El grupo Alibaba, imperturbable ante la operación
Pese a que Alibaba tendrá que inyectar una cantidad importante de capital para contribuir a la reestructuración obligada de Ant, Fitch considera que la principal línea de negocio comercial del grupo se mantendrá inalterable.
La agencia avisa, no obstante, de que este pronóstico parte de la premisa de que los servicios de pago de Ant a través de Alipay no se vean interrumpidos por la presión regulatoria, una posibilidad que ya sobrevoló el horizonte de la empresa el pasado septiembre.
"Creemos que el riesgo de que Alibaba tenga que inyectar un capital sustancial en Ant para su reestructuración es manejable. Alibaba cuenta con una amplia liquidez, con un efectivo neto de 292.000 millones de yuanes (40.569 millones de euros) a finales de septiembre de 2021", indica Fitch en su informe.