ETF: la forma más segura de invertir en criptomonedas

El interés de los inversores por las criptomonedas aumenta año a año. Ni las advertencias del Banco de España ni las de la CNMV alertando sobre los riesgos que genera su inversión derivados de la falta de regulación, su alta volatilidad y su complejidad disuaden a los más de 4,4 millones de españoles que ya apuestan por ellas.

A pesar de este interés, aún es escaso el número de entidades financieras que ofrecen servicios y productos relacionados con criptodivisas, por lo que los inversores cuentan con pocas alternativas para invertir en ellas.

Primeros movimientos

Actualmente no hay fondos UCITS que permitan invertir en criptoactivos, pero el mercado se está moviendo y en octubre del año pasado se aprobó en EEUU el primer ETF vinculado a futuros de bitcoin, el ProShares Bitcoin Strategy ETF que cotiza en la bolsa de Nueva York.

El fondo sigue los futuros de bitcoin de CME Group, o lo que es lo mismo, los contratos que especulan con el precio futuro del bitcoin. Unos días después se lanzó otro ETF de futuros, el Valkyrie Bitcoin Strategy y, según prevén los expertos, a medio plazo se espera una avalancha de ETF de futuros de criptodivisas.

En Europa hay gestoras que ya tienen productos relacionados con criptomonedas cotizando en los mercados, como ETC Group, que posee el ETC Group Physical Bitcoin; Wisdom Tree, con el Wisdom Tree Bitcoin; CoinShares, con CoinShares Physiscal Bitcoin, y 21Shares, con 21Shares Bitcoin ETP.

Estos cuatro fondos que cotizan en la bolsa alemana, los ofrece en España el bróker DeGiro a clientes minoristas. Aunque no están registrados en nuestro país, la CNMV permite venderlos siempre que no se comercialicen activamente.

También Renta 4 ofrece algunos de ellos a inversores profesionales, mientras que XTB ofrece CFD sobre 14 criptomonedas.

Una opción más transparente

A juicio de los expertos, los fondos cotizados son la mejor opción para introducirse en el mercado de las criptomonedas.

Entre sus ventajas destacan que se compran y se venden en la bolsa de valores, lo que hace que su operativa sea relativamente fácil y que la inversión indirecta ayude a mitigar riesgos como la transferencia de fondos a una cuenta equivocada o la pérdida de contraseñas privadas.

Para Javier Tejedor, jefe de producto de trading de Singular Bank, los ETF son «la mejor forma» de invertir en criptomonedas, ya que «muchas plataformas de inversión no son demasiado transparentes en los costes de transacción. Esto, unido al riesgo de hackeo, hace que los productos cotizados que replican el precio de la criptodivisa sean una opción más sencilla que la inversión directa para inversores menos avanzados».

También para Jaime Martínez Tascón, profesor de OBS Business School y director de Inveretik, la forma más segura de invertir en estos activos es a través de un fondo, debido a que «al adquirir varios activos se diversifica el riesgo, además de ser más fácil compararlos con otros fondos o con un índice para valorar su comportamiento».

Inversión compatible

Otros expertos como Ana Elliot, directora de desarrollo de negocio de Coinmotion España, consideran que ambas formas de inversión «son compatibles» dependiendo del objetivo que se pretenda.

«Los ETF implican una gestión profesional y beneficios fiscales. Sin embargo, conllevan límites a la hora de construir una cartera: hoy por hoy, la oferta de fondos que invierten en criptomonedas es muy limitada. Además, suponen un mayor coste al soportar comisiones de custodia y de gestión», indica.

A su juicio, invertir de forma directa «es más barato, la oferta es mayor y permite elegir entre varios tipos de criptomonedas, aunque requiere conocer mejor el producto y seguir su evolución».

Por su parte, Silvia García-Castaño, directora general de inversiones y productos de Tressis, apuesta por otra alternativa, invertir a través de la compra de acciones de compañías que tengan exposición a la tecnología blockchain.

¿Qué parte de la cartera invertir?

Todos los expertos coinciden en que las criptomonedas no son recomendables para todos los inversores y que su porcentaje en las carteras debe ser muy ajustado. Ana Elliot estima que «no debería ir más allá del 5 o el 10 por ciento, y en perfiles muy agresivos podría ser algo superior».

Luis Gasca, profesor del CEF, se muestra más cauto y cree que el porcentaje máximo de exposición tendría que estar entre el 1 y el 5 por ciento de la cartera e invertir como mínimo en tres criptomonedas, ya que «no son productos recomendables, pero la gente es libre y si quieren invertir en ellas lo harán. El mensaje sería exponer la menor cantidad de capital a estos productos».