¿Por qué confiar en España? La gran pregunta de la banca privada

La banca privada internacional con presencia en España ve como actores de relevancia en el sector abandona el país, tal es el caso de UBS y BNP Paribas. Pero las entidades reunidas por la revista Inversión en su décimo Foro anual de Banca Privada se mostraron tranquilas con su posicionamiento en el país. 

Los directores generales de las entidades suizas Pictet, Lombard Odier y Mirabaud sí reconocieron que España es un caso particular puesto que la presencia de la banca comercial está muy arraigada entre los clientes de banca privada y que resulta complejo ganar cuota de mercado. 

“El problema reside en el propio modelo de negocio. La banca privada internacional tiene que saber bien el nicho de mercado a atacar y este tiene que ser el de los más alto patrimonios ofreciéndoles servicios de alta calidad y alejándose de los clientes que buscan los dos servicios en uno, que son los de un menor poder adquisitivo”, señaló José Couret, director general de Lombard Odier España. 

Los banqueros estimaron que es fundamental ofrecer proyectos a largo plazo, que el cliente vea que tu perspectiva de recorrido en España es perpetua, lo que se debe potenciar “atrayendo talento y creando un equipo sólido, lo que lleva su tiempo”, expresó Luis Sánchez Lamadrid, director general de banca privada de Pictet WM España. 

La banca privada ante la guerra en Ucrania 

Pese a su confianza, Sánchez reconoció que en el corto plazo “permanecerán los movimientos corporativos en el sector”, pues las entidades observarán como su rentabilidad en la banca privada no es adecuada. Pero la misión es compleja por la fuerte competencia con el resto de entidades.

La guerra en Ucrania fue otro de los temas tratados en esta mesa del Foro de Banca Privada y los banqueros coincidieron en que las entidades no están actuando de una forma distinta a conflictos bélicos pasados. 

“Estamos hablando de bancos con cientos de años de historia en los que se han enfrentado a las guerras mundiales y el tiempo ha demostrado que ante conflictos bélicos la mejor respuesta es mantenerse tranquilo sin perder la vista en el largo plazo”, comentó Álvaro Nieto, director general de Mirabaud & Cie (Europe) España. 

Pero una cuestión es la visión de los banqueros privados internacionales y otra el deseo de sus clientes. Ante la invasión de Ucrania están realizando un importante trabajo de asesoramiento a sus clientes para frenar a los que quieren vender compulsivamente, pero también a los que se quieren lanzar sin medida a las compras. 

La complejidad del inversor español 

La situación tiene además un matiz importante en el mercado español que pasa por el perfil del cliente en el país. 

"El cliente español tiene que asumir que para rentabilidades adecuadas tiene que tomar riesgos determinados, y esta explicación no hay que darla en la mayoría de las economías desarrolladas", señaló Couret. 

"En España, el cliente quiere tener mucha renta variable solo cuando el mercado está alcista y eso no puede ser porque solo quiere entrar cuando está, como poco, calmada y se pierde mucha rentabilidad", remachó Sánchez. 

Pero hay espacio para el optimismo: “El inversor español cada vez se va adaptando más y aprendiendo más y es más permeable a los activos de riesgo, pero aún queda mucho camino", explicó Nieto. 

Así, las tres entidades comparten la visión de que el inversor español, aunque avanza en sus conocimientos de mercado, sigue mostrando poco gusto por el riesgo, lo que implica menores rentabilidades al no atreverse a apostar en momentos complejos del mercado. 

El triste adiós a las sicavs con la vista en Luxemburgo 

La mesa cerró con el lamento de la banca privada internacional ante el hundimiento de las sicavs en España por la injerencia política. 

Pictet habló de “miopía política”, pero que sus clientes pueden estar tranquilos para mover su inversión a Luxemburgo y hacer carteras de fondos. 

Mirabaud calcula que el 98 por ciento de las sicavs se acogerán al régimen de trasvase a fondos, como nuevo vehículo en Luxemburgo o, incluso, como unit linked. 

Para Lombard Odier "se va a perder mucho talento al destruir un vehículo atractivo por un capricho político, pero para los clientes más grandes siempre estará la alternativa de Luxemburgo”.