Robinhood es la primera en dar el "no quiero" al barón de las criptomonedas
Robinhood descarta venderse, a pesar de su fuerte declive del último año, y del presunto interés de Sam Bankman-Fried en hacerse con su cartera de clientes
Desde que debutara en bolsa en julio de 2021, la plataforma de inversión que se convirtió en una de las estrellas de la pandemia, Robinhood, está recorriendo un camino pedregoso.
Su cotización se desplomó casi un 70 por ciento desde entonces, y de forma paralela al descenso de sus acciones, la empresa vio como sus ingresos se reducían a casi la mitad entre el segundo trimestre de este año y el mismo periodo del año anterior.
El rápido declive de la compañía en los últimos 12 meses llevó a muchas voces del mercado a preguntarse qué perspectivas de futuro tenía la compañía cotizada en el Nasdaq. Pero ante la incertidumbre, su fundador quiso mandar un mensaje claro.
A pesar del revuelo del mercado acerca del interés de Sam Bankman-Fried, el niño prodigio de las finanzas convertido en multimillonario de las criptomonedas, en hacerse con Robinhood, la plataforma de inversión no está en venta.
"En una palabra: no", afirmó el CEO de Robinhood, Vlad Tenev, durante una llamada de la empresa con sus inversores, al ser preguntado sobre la posibilidad de que otra empresa les comprara.
"Creo que estamos en una gran posición como empresa independiente. Nos quiero como empresa independiente", añadió.
Sam Bankman-Fried, el pretendiente rechazado por Robinhood
Como ya desgranó la revista Inversión en su número 1.295 publicado el 29 de julio, Sam Bankman-Fried es un fenómeno de las finanzas que comenzó a trabajar en la industria a los 21 años, y que a su tierna edad de 30 años, cuenta con un patrimonio estimado de 21.100 millones de dólares.
SBF, como se conoce a Bankman-Fried, fundó la plataforma de compraventa de criptomonedas FTX, y en los últimos meses, coincidiendo con el hundimiento del criptomercado, llevó a cabo una oleada de transacciones como ninguna otra en la breve historia del sector.
El cofundador y director ejecutivo de la bolsa de activos digitales FTX compró dos empresas, apuntaló la plataforma de criptomonedas BlockFi e intentó salvar otra, Voyager Digital, con un gran préstamo.
Entre operación y operación, SBF también se hizo con el 7,6 por ciento del capital social de Robinhood, y las especulaciones del mercado apuntaban a que su intención pasaba por lanzar una opa sobre el porcentaje de acciones restantes, en una transacción que reforzaría los esfuerzos de FTX por ofrecer la negociación de acciones a sus usuarios.
El estadounidense, sin embargo, se topó con el rechazo frontal de un Robinhood que, a pesar de su evidente mal momento, quiso sacar músculo durante su presentación de resultados.
La plataforma plantea seguir creciendo mientras prepara miles de despidos
La presentación de resultados en la que el CEO de Robinhood, Vlad Tenev, echó balones fuera sobre cualquier posible venta de sus activos, también sirvió para constatar la mala salud de su empresa.
A pesar del esfuerzo por camuflar las disminuciones de sus cifras mediante una comparativa secuencial, en vez de interanual, la realidad es que la caída en los ingresos fue del 44 por ciento, pasando de los 565 millones de hace un año, a los 318 millones de dólares obtenidos entre abril y junio de 2022.
A ojos de Robinhood, sin embargo, estos 318 millones de euros resultaban positivos porque suponían un 6 por ciento de incremento respecto al primer trimestre de 2022.
Hay dos cifras, aun así, que la compañía no puede disfrazar.
La primera es la de usuarios activos por mes, que del primer trimestre al segundo se redujo un 10 por ciento hasta los 14 millones, y hasta un 33 por ciento en contraste con el segundo trimestre de 2021, periodo en el que Robinhood acumulaba 21,3 millones de usuarios activos.
La segunda es la del número de trabajadores que tendrá que despedir para reducir costes, que la empresa anunció en su blog que sería de aproximadamente el 23 por ciento de su plantilla.
"Queridos robinhoodies", escribía el CEO en dicha publicación, "aunque los empleados de todas las funciones se verán afectados, los cambios se concentran especialmente en nuestras funciones de operaciones, marketing y gestión de programas".
Tenev culpaba de estos recortes al "deterioro adicional del entorno macroeconómico", que provocó "una inflación en máximos de 40 años acompañada de un amplio desplome del mercado de criptomonedas".
Pero a pesar de este contexto, y de las obvias dificultades de su compañía, el CEO no se abrió a una venta de su empresa, y redobló su apuesta durante la llamada mantenida con inversores.
A pesar de sus pérdidas de 682 millones de euros al final del semestre, Tenev indicó que Robinhood está buscando sus propias adquisiciones, señalando que la empresa declaró 6.000 millones de dólares en efectivo en su balance al final del trimestre.
Si esta noticia ha sido útil para ti, apúntate a nuestros boletines ¡No te decepcionaremos! También puedes añadir las alertas de finanzas.com a tus redes y apps: Twitter | Facebook | LinkedIn | Whatsapp | Flipboard. Y sigue los mejores videos financieros de Youtube.