Consolidaciones para unas correcciones en cualquier dirección
La anodina jornada de ayer en cuanto a datos importantes cumplía con su condición de sesión de transición o de consolidación de los fuertes rebotes que se habían producido en la anterior. Sólo una bolsa se salía del guión y además a lo grande: la española. El dato de la morosidad bancaria, la operación de ACS con la venta de Iberdrola, el nuevo castigo a Repsol en el final de la sesión y así prácticamente todos los valores acabaron por lastrar al selectivo hispano a nuevos mínimos, con la mayor caída anual. Técnicamente quedó de nuevo muy tocado ya que se anulaba el patrón envolvente que había dejado el día anterior, teóricamente alcista, pero que comentábamos con boca pequeña que debía de confirmarse. Y eso que a prima de riesgo se comporto. El volumen fue elevado el más alto del año sin tener en cuenta un viernes de vencimiento como el que se aproxima.