La reforma laboral logra reducir los contratos temporales pero no garantiza mayor calidad del empleo de los nuevos indefinidos
Según la segunda edición de ‘Human Capital Outlook-Observatorio Trimestral del Mercado del Trabajo’
La reforma laboral que impulsó el Gobierno logró reducir los contratos temporales pero no garantiza un aumento de la calidad del empleo de los nuevos contratos indefinidos, según señala la segunda edición del ‘Human Capital Outlook-Observatorio Trimestral del Mercado del Trabajo’ elaborado por el Instituto EY-Sagardoy Talento e Innovación, junto con Fedea y BBVA Research, que se presentó este miércoles en Málaga.
Explica que los datos de empleo y de la EPA después de la entrada en vigor de la reforma laboral son muy positivos, aunque habría que ponerlos en perspectiva ya que solo se disponen de cuatro meses de estadísticas.
En los meses que han seguido a la entrada en vigor de la reforma laboral, los datos de contratación muestran un rápido incremento de los contratos indefinidos y una fuerte reducción de la contratación temporal que ha llevado a mínimos históricos el peso de los contratos temporales en el flujo total de nuevos contratos registrados cada mes.
En los cuatro primeros meses de 2022 se superaron los 1,7 millones de contratos indefinidos registrados. Esto supone un millón más que en el mismo período de 2019 y cerca de 800.000 más que en 2007. Las tasas de empleo se mantienen en máximos históricos si no se tienen en cuenta las horas trabajadas y, pese a la elevada inflación, se mantiene la moderación salarial.
En esta segunda edición del ‘Human Capital Outlook’ se presta una especial atención al impacto que está teniendo la reforma laboral aprobada en Consejo de Ministros el 28 de diciembre de 2021 mediante el Real Decreto-Ley 32/2021 y, además, la publicación incluye un análisis de ‘Novedades Legislativas’ del primer trimestre del año y un apartado de ‘Tendencias en Capital Humano’.
MERCADO LABORAL
En lo referente al mercado laboral los datos son claramente positivos, aunque el estudio invita a plantear ciertas reservas ya que “solo tenemos datos de empleo y contratación posteriores a la reforma para cuatro meses y una única observación de la EPA que cubre el primer trimestre del año en curso”, por lo que es necesaria “una mayor prudencia y disponer de series más largas a la hora de valorar los efectos de la nueva normativa”.
El análisis realizado desde los datos refleja que tanto la ocupación de la EPA, como la de la Contabilidad Nacional Trimestral (CNTR) y la afiliación a la Seguridad Social superan ya los niveles registrados en el trimestre previo a la pandemia (2019T1). Sin embargo, ni el empleo efectivo recogido en la EPA, ni las horas de trabajo reflejadas en la EPA y la CNTR han alcanzado todavía los valores del primer trimestre de 2019.
También continúa la recuperación, aunque con matices dependiendo de la variable considerada y con una contribución importante del sector público. De hecho, el empleo en el sector público tira del número de ocupados, pero el crecimiento de las horas trabajadas se reparte con el sector privado. Las tasas de empleo se sitúan en máximos históricos si no se tienen en cuenta las horas trabajadas. Al mismo tiempo, El paro recupera sus niveles pre-pandemia, pero gana peso el de larga duración.
En cuanto a los salarios y, pese al alza inflacionista, el informe concluye que “se mantiene la moderación salarial. De hecho, entre 2020 y 2021 la inflación aumentó en más de 3 puntos (del -0,3% al +3,1%) y la variación de los salarios nominales se redujo en casi 2 puntos, pasando del +1,3% al -0,6%".
CONTRATACIÓN
Uno de los aspectos a destacar es que la reforma laboral está cambiando los patrones de contratación, “con un fuerte aumento de la contratación indefinida (especialmente en contratos fijos-discontinuos y a tiempo parcial) y una rápida caída de la contratación temporal”.
En los cuatro primeros meses de 2022 se ha registrado el máximo histórico de contratos indefinidos y se ha producido una reducción sin precedentes de los contratos temporales. Aumenta significativamente el empleo indefinido (EPA), pero no se puede atribuir en exclusiva a la RL2022 porque también refleja la reactivación post-pandemia y la tendencia que comenzó en 2014.
No obstante, los analistas del ‘Observatorio del Mercado del Trabajo’ puntualizan que “el cambio en el tipo de contratos no asegura un aumento real de la calidad del empleo y podría tener un coste en términos de su menor crecimiento debido al aumento de la rigidez en la contratación temporal”.
En los cuatro primeros meses de 2022 se superaron los 1,7 millones de contratos indefinidos registrados. Esto supone un millón más que en el mismo período de 2019 y cerca de 800 mil más que en 2007, que fue el máximo histórico hasta entonces.
Respecto al impacto en el tipo de los contratos derivados de la reforma la publicación destaca que la nueva ley “claramente está consiguiendo que el peso de los contratos temporales se reduzca, penalizando o prohibiendo su uso. Dado que la incertidumbre jurídica y el coste de extinción de los contratos indefinidos, tanto ordinarios como fijos-discontinuos, continúan siendo mayores que las de los temporales, es posible que una parte de las conversiones no tengan lugar y que algunos contratos nunca se celebren”.
Además, señalan que “los contratos indefinidos que más aumentaron en términos relativos son los llamados fijos-discontinuos, con períodos de actividad intermitentes, seguidos por los indefinidos a tiempo parcial. De hecho, la suma de los contratos fijos- discontinuos y a tiempo parcial alcanzó en abril el 60% de los contratos indefinidos formalizados durante el mes. En ambos casos, los trabajadores acumulan menos horas de trabajo que en un contrato indefinido ordinario a tiempo completo”.
En el apartado de ‘Novedades Legislativas’, la publicación destaca, entre otras, el Real Decreto 152/2022, de 22 de febrero, por el que se fija el salario mínimo interprofesional para 2022 o el Real Decreto-Ley 6/2022, de 29 de marzo, por el que se adoptan medidas urgentes en el marco del Plan Nacional de respuesta a las consecuencias económicas y sociales de la guerra en Ucrania.
LEGISLACIÓN
Dentro del capítulo legislativo, Martín Godino, socio director de Sagardoy Abogados, reflexiona sobre cómo abordar los planes de pensiones de empleo por parte de los agentes sociales.
En su análisis sobre el proyecto de ley para el impulso de estos planes de pensiones de empleo, que actualmente cubre únicamente a algo menos de dos millones de trabajadores, considera que “sean las que fueren las razones que explican la falta de desarrollo de los planes de pensiones de empleo, esta iniciativa del Gobierno para impulsarlos de forma decidida ha de ser recibida por todos como una buena noticia y una oportunidad. El proyecto de ley, de manera inteligente, confía el impulso y desarrollo de los planes de pensiones a la negociación colectiva de ámbito sectorial, que podrá́ promoverlos a través de convenios o acuerdos colectivos específicos y que, en virtud de su fuerza vinculante, podrán imponer la adscripción obligatoria al plan de las empresas incluidas en su ámbito funcional y territorial de aplicación”.
En lo referente a las ‘Tendencias en Capital Humano’ el estudio del Instituto EY-Sagardoy Talento e Innovación aborda un asunto crucial para las compañías como es la transformación y la retención del talento de sus empleados.
Las empresas de todos los sectores están invirtiendo cada vez más en programas de reskilling para transformar su capital humano y poder retener a su mejor talento.
La publicación realizó una encuesta a más de 500 lideres de recursos humanos en todas las industrias principales para evaluar sus prioridades y desafíos esperados en 2022. Desarrollar habilidades y competencias críticas encabeza la lista, pero muchos lideres de recursos humanos también priorizaran la gestión del cambio, los liderazgos y la diversidad, la equidad y la inclusión.
PRESENTACIÓN
La apertura del acto de presentación estuvo presidida por Fátima Báñez, exministra de Trabajo y presidenta del Instituto EY-Sagardoy Talento e Innovación; Elías Bendodo, consejero de Presidencia de la Junta de Andalucía; Carlos Rubio, presidente de la Autoridad Portuaria de Málaga, y Javier González de Lara, presidente de la Confederación de Empresarios de Andalucía.
En la jornada también participaron Martín Godino, socio director de Sagardoy Abogados; Juan Pablo Riesgo, socio responsable de EY Insights; Antonio García, socio responsable de EY en Málaga; Juan Medina, socio responsable de Sagardoy Abogados en Málaga; Rafael Doménech, responsable de análisis económico de BBVA Research; y Florentino Felgueroso, Investigador asociado de FEDEA. El acto de clausura corrió a cargo de Rocío Blanco, consejera de Empleo, Formación y Trabajo Autónomo de la Junta de Andalucía.