Alemania negociará unilateralmente la compra de la vacuna rusa Sputnik-V
La principal potencia europea se separa de la estrategia de vacunación común aunque dice que la adquisición está sujeta a que la Agencia Europea del Medicamento dé su aprobación al preparado
Alemania negociará unilateralmente la compra de la vacuna rusa Sputnik-V para acelerar la campaña de vacunación en el país.
Así lo ha anunciado el ministro de Sanidad germano, Jens Spahn, en una entrevista concedida a la radio local WRD un día después de la reunión extraordinaria de ministros de Sanidad de la UE y también un día después de que el Estado federado alemán de Baviera firmara un contrato unilateral para adquirir 2,5 millones de dosis del preparado ruso.
En concreto, Spahn ha explicado que va a sentarse a negociar con las autoridades rusas para ver cuántas dosis están en condiciones de administrarles y en qué plazos.
Sujeta a la aprobación de la EMA
Si bien, el ministro ha aclarado que la adquisición está sujeta a la aprobación definitiva de la Agencia Europea del Medicamento, que actualmente está conduciendo una “inspección de buenas prácticas clínicas” para garantizar que los ensayos se hicieron adecuadamente (al parecer, existen sospechas de que la participación de los militares y funcionarios del Estado en los ensayos no fueron tan voluntarias como asegura el Kremlin).
Asimismo, Spahn ha asegurado que su decisión no implica violar el pacto alcanzado a nivel europeo para la compra centralizada de vacunas puesto que la Sputnik-V no entra dentro del mismo.
Alemania ha decidido dar este paso ante la reticencia de Bruselas a negociar la compra de vacunas rusas por considerar que estas llegarían a partir del verano, cuando Europa ya contará con suministros suficientes de las otras farmacéuticas con las que ha llegado a acuerdos.
La grave tercera ola de Covid en Alemania
Esta decisión se ha tomado en un contexto difícil para Alemania, que está inmersa en una tercera ola de Covid-19 de extrema gravedad y que no termina de controlarse pese a las restrictivas medidas de distanciamiento social impuestas por las autoridades.
Otros países como Hungría o Eslovaquia han comprado también vacunas a Rusia (e, incluso, a China) pero en su caso no han esperado a que estas obtuvieran la autorización de la Agencia Europea del Medicamento.
En realidad, lo cierto es que la política de vacunas es una competencia nacional de los estados miembros de la UE y estos pueden negociar con cualquier farmacéutica que no esté dentro de la cartera que se ha pactado para la estrategia común.
Las farmacéuticas con las que se ha negociado la compra de vacunas dentro de la estrategia común europea son Pfizer-Biontech, Moderna, Astrazeneca y Janssen, aunque Bruselas también ha pactado la compra de dos inoculaciones que aún no han recibido la autorización reglamentaria: Sanofi-GSK y Curevac. Además, la Comisión Europea está en negociaciones adicionales con los laboratorios Novavax y Valneva.