China echa agua al acuerdo comercial anunciado por Trump
El primer pacto anunciado por Trump incluye la premisa de que China gastará 50.000 millones al año en productos agrícolas estadounidenses, pero el gigante asiático se niega a responder preguntas sobre su compromiso exacto para cumplir este acuerdo.
Tras 18 meses de guerra comercial parece que Estados Unidos y China han cerrado la primera fase de un acuerdo. Así lo comunicó este viernes Donald Trump y durante unas horas parecía que el fin de esta disputa que ha mantenido al mundo y a los mercados en vilo estaba muy cerca. Pero enseguida afloraron las dudas.
Este primer pacto incluye la premisa de que China gastará 50.000 millones al año en productos agrícolas estadounidenses. Trump aseguró con confianza que el gigante asiático "alcanzará la meta muy pronto". En cambio, su representante comercial, Robert Lighthizer, aunque hizo hincapié en el salto que supondría para China este acuerdo en cuanto al nivel de sus importaciones, se negó a ser muy específico con los datos, según Bloomberg. Y, a la vez que Estados Unidos le contaba al mundo con orgullo cómo avanzaban en las negociaciones, China se negaba a responder preguntas sobre su compromiso exacto para cumplir este pacto.
El secretario de Agricultura de Estados Unidos, Sonny Perdue, afirmó el jueves que China había asegurado comprar productos agrícolas por un valor de entre 40.000 y 50.000 millones de dólares, pero que era reacia a comprometerse con los contratos. En este sentido, el representante comercial sugirió el viernes en rueda de prensa que la cifra más alta es "aspiracional". Lighthizer explicó que la idea era que China aumentara sus compras anuales de productos agrícolas estadounidenses en 40.000 millones durante los próximos dos años e intentar y poner todo su empezó en que esa cifra pueda llegar a los 45.000 millones por año.
Ahora China estudia si puede alcanzar la cantidad impuesta por el magnate sin tener que pagar precios superiores a los del mercado. "No comprará productos agrícolas de productores estadounidenses para cumplir con el objetivo si puede comprarlos por menos de competidores como Brasil", ha asegurado a Blooomberg una fuente anónima que conoce los hechos.
Trump busca contentar al mundo rural para su reelección
Esta exigencia de Trump tiene como objetivo aumentar el entusiasmo por el acuerdo en las zonas rurales de Estados Unidos. Se trata de una circunscripción política clave para el presidente mientras hace campaña para la reelección.
Según el magnate, la compra anual de Pekín sería más del doble de los 24 mil millones de dólares en productos agrícolas que China que importaba en 2017, un año antes de que comenzara la guerra comercial. La mayor cantidad que el país asiático ha llegado a comprar a productores estadounidenses fue de 29 mil millones de dólares en 2013, una cifra que está muy por debajo de la que ahora exige Estados Unidos.
Brasil como alternativa
En el momento en el que Trump anuncio este pacto, el precio de la soja y el cerdo aumentó notablemente, aunque después los productores estadounidenses tuvieron que retroceder por precaución. Y es que Brasil también es un importante proveedor agrícola del país asiático. De hecho, si China da el salto en las compras de soja en Estados Unidos, la relación con el país sudamericano podría quebrarse y terminar en una nueva disputa comercial entre Brasil y China. Así lo ha señalado Joseph Glauber, ex economista jefe del Departamento de Agricultura de los Estados Unidos y miembro del Instituto Internacional de Investigación sobre Políticas Alimentarias.
Si bien las exportaciones estadounidenses de carne de cerdo y posiblemente aves de corral y carne de ternera podrían aumentar como resultado de la epidemia de peste porcina, las exportaciones estadounidenses de carne de cerdo en todo el mundo el año pasado solo ascendieron a alrededor de 6.4000 mil millones de dólares, apunta Bloomberg. "Un aumento del 50% a ese total solo agregaría alrededor de 3.2 mil millones de dólares. Y de todos modos, podría aumentar los precios de la carne para los consumidores estadounidenses", afirmó Glauber.
Para el ex econonomista jefe, tampoco es probable que los chinos alcancen ese nivel de compra a través de productos como maíz, sorgo, granos secos destilados y etanol, . El total de las exportaciones estadounidenses de maíz, soja, carne de ternera y cerdo a todo el mundo solo promedió 44.2 mil millones de dólares entre 2014 y 2018.
El presidente de la American Farm Bureau Federation, Zippy Duvall, aseguró en un comunicado que la organización está "ansiosa por conocer los detalles del compromiso de China de comprar más productos agrícolas". Habrá que esperar a ver el nivel de compromiso del país asiático antes de asegurar que el fin de la guerra comercial se acerca.