Desmontando al BCE: tipos bajos hasta 2022, nuevos recortes y escaso impacto macro
La penúltima reunión de Mario Draghi como presidente del Banco Central Europeo (BCE) había generado mucha expectación por las nuevas[…]
La penúltima reunión de Mario Draghi como presidente del Banco Central Europeo (BCE) había generado mucha expectación por las nuevas medidas expansivas que iba a anunciar. Y lo hizo en línea de lo esperado por el mercado. Rebaja de 10 puntos básicos en la facilidad de depósito, con dos tramos, y compras de deuda de 20.000 millones de euros al mes. Pero la clave de esta reunión, y que marcará el devenir de Christine Lagarde como próxima presidenta del organismo, es que las medidas de estímulo seguirán el tiempo que sea necesario para que la inflación converja al objetivo del 2%. Es decir, el BCE no ha querido poner un plazo al fin de este QE, como sí ocurrió en el anterior.
Tres son las causas que justifican las nuevas medidas expansivas del BCE: una desaceleración prolongada en la economía, la persistencia de riesgos a la baja en el comercio mundial, la revisión a la baja en las proyecciones de inflación.
Paul Diggle, economista senior de Aberdeen Standard Investments, destaca esto último: "El BCE anunció un amplio paquete de medidas de estímulo, sobre todo una vez que se tenga en cuenta el carácter abierto del programa de adquisición de activos (QE). Estos estímulos de la política monetaria son una de las razones importantes por las que en nuestras previsiones económicas de la zona euro tenemos unas tasas de crecimiento bajas, pero no negativas. Pero seguimos pensando que el BCE tendrá que hacer más con el tiempo, incluyendo recortes aún más profundos de los tipos de interés". Es de la misma opinón Philippe Waechter, Chief Economist de Ostrum AM (affiliate de Natixis IM), que no ve que haya una normalización de la política monetaria pronto, y que el nuevo QE tenga un carácter temporal. "La represión financiera del BCE implica que los tipos de interés, para todos los vencimientos y en todos los países, van a ser bajos y negativos durante un periodo muy muy largo de tiempo" y señala que "los tipos de interés a corto plazo permanecerán en los niveles actuales, al menos, hasta el año 2022".
Sin embargo, este paquete de medidas nace ya limitado y los expertos no creen que "el impacto [macroeconómico] de esta medida" sea importante. Esty Dwek, también de Natixis, reitera esta creencia y pone énfases en que Lagarde, que sucederá a Draghi a partir de noviembre ejerza "una presión adicional" para que los Gobiernos impulsen una política fiscal expansiva, puesto que "la política monetaria por sí sola no puede impulsar el crecimiento europeo".
Para las entidades financieras "la extensión aprobada del plan TLTRO será un elemento positivo". continúa el analista de Natixis. La experta de Natixis IM señala la "preferencia por el crédito de EE UU y Europeo frente a la deuda soberana europea", tras la decisión del BCE. En la misma línea, Dwek considera que "los activos de riesgo deberían encontrar más apoyo debido a las políticas monetarias acomodaticias, que se mantendrán en boga durante algún tiempo, y no solo en Europa, como se ve en la tendencia acomodaticia global". Natixis IM espera una cierta consolidación en la renta fija, "ya que las rentabilidades experimentadas en verano eran demasiado bajas para el actual escenario de crecimiento", si bien descarta un "viraje brusco" en las rentabilidades.
Los analistas de A&G cree que Draghi no decepcionó, especialmente al introducir el esperado escalonamiento. Para los analistas de Vontobel, el "tiering" o jerarquización de la facilidad de depósitos aplicada a os bancos que se ha introducido es positivo para el sector bancario, ya que se aplicará un múltiplo de 6 a las actuales exigencias de reservas mínimas. Entonces este volumen X 6 se librará y estará exento de los tipos negativos - los bancos no tendrán que pagar tipos de interés negativos sobre un mayor volumen de depósitos en el BCE. También en el sistema de tiering, el 50% de los depósitos de los bancos en el BCE se librarán de los tipos negativos. Esto es un gran apoyo para los bancos a pesar del recorte de la facilidad de depósito. Como resultado, las acciones de los bancos y los Coco's se beneficiarán, ya que el beneficio neto de los bancos no se verá tan afectado como se teme.
Por último, Esty Dwek considera que "Draghi ha marcado el tono para los próximos meses y, probablemente, los próximos años". Mirando hacia la semana próxima, Dwek espera que la Fed rebaje tipos 25 puntos básicos y cree que la "Fed mantendrá un ritmo lento de ajuste, puesto que la economía de EE UU aún se mantiene sólida".