El BCE recarga su bazuca con 600.000 millones de euros
El banco central ampliará hasta 2021 el volumen de compras de su programa de emergencia pandémica con 600.000 millones
El Banco Central Europeo (BCE) se jugaba mucho en su reunión mensual. El objetivo era no decepcionar. Y no lo ha hecho inyectando 600.000 millones de euros en compras.
De esta manera, el BCE recarga su programa de emergencia pandémica, conocido por sus siglas en inglés como PPE, con 600.000 millones de euros. Además, lo extiende hasta junio de 2021 o hasta que acabe la crisis de coronavirus.
Esta ampliación está por encima de la parte alta de las estimaciones de los analistas, que esperaban un incremento de las compras de 500.000 millones de euros, puesto que a ritmo actual el programa se acabaría en octubre de este año.
Asimismo, lo extiende seis meses más, ya que la fecha estimada para su fin era para diciembre de este año.
Extensión del PPE
El PPE fue aprobado en marzo como consecuencia de la crisis económica provocada por el coronavirus y que tiene objetivo minimizar el fuerte impacto que tiene la crisis en la economía de la eurozona.
Según la presidenta del organismo, Christine Lagarde, la economía de la eurozona caerá cerca del 8% el mayor dato jamás registrado, muy por encima de la caída del PB con la crisis financiera.
Se aprobó entonces un programa de compras de 750.000 millones de euros que estaría vigente hasta final de año. Pero a raíz del volumen de compras, los analistas esperaban que terminara en octubre.
De ahí la importancia de aprobar una ampliación y esta era la reunión clave. Desde IG señalan que el BCE tenía como principal objetivo no decepcionar a los mercados.
Con estos 600.000 millones de euros, el volumen total supera el billón de euros y rompe con la resistencia de los halcones alemanes.
Mondher Bettaieb, director de crédito de Vontobel AM, en relación a esto último apuesta por retirar más bonos gubernamentales en euros del mercado para dejar espacio para la próxima generación de fondos de la Unión Europea, que necesitará emitir sus propios bonos y en cantidades bastante elevadas, dado el tamaño del fondo, 750.000 millones.
Pero todo esto debería proporcionar un mayor apoyo a los bonos corporativos, sobre todo, “en los mercados desarrollados”.
Asimismo, lo amplía 6 meses más, bajo la premisa de que podría continuar si así fuera necesario por la crisis provocada por el coronavirus.
Más decisiones de política monetaria
El organismo, que celebraba su reunión en la sede de Frankfurt, mantiene los tipos de interés sin cambios, en 0%, nivel en el que llevan anclados desde 2016.
También mantiene sin cambios la tasa de depósito, en el -0,5%, que es el interés que cobran a los bancos por tener aparcado el dinero en el organismo.
Al respecto, el BCE estableció en la reunión de septiembre de 2019 un tiering, es decir, dos niveles, para aquellos que rebasaran una cierta cantidad depositida se les cobraría el -0,6%, y de esta manera les obligaría a prestar dinero a familias y empresas.
Mayor flexibilidad de las operaciones a largo plazo
El BCE está sacando toda la artillería disponible en una crisis sin precedentes. Ante el error de la primera reunión del BCE, cuando Lagarde señaló que no estaba para cerrar los spreads, se propuso no repetir errrores.
El primero fue lanzar el progama de emergencia pandémica dotado con 750.000 millones de euros.
En segundo lugar, inyectar liquidez al sistema con las TLTRO, una serie de subastas semanales. En ese sentido, el BCE en la reunión de abril adoptó nuevas medidas de flexibilización de los tipos a los que se realizan.
Por un lado, se aprobaron con unas condiciones de 50 puntos básicos por debajo del sistema, lo que supone una interés del -1%.
También aprobó otra subastas con igualmente condiciones ventajosas conocidas como PELTRO, para hacer frente a la pandemia.
La prima de riesgo española nota una mejoría al bajar de los 90 puntos básicos.
Oposición del Tribunal Constitucional
El programa de emergencia pandémica chocó con el Tribunal Constitucional alemán, que establecía cierta ilegalidad en el esta ayuda. Lagarde salió al trance asegurando que el BCE hará todo lo que sea necesario para ayudar a los países perjudicados por la crisis provocada por la pandemia.
En ese sentido, la Comisión Europea (CE) tambien lanzó un fondo de reconstrucción con 750.000 millones de euros, de los cuales España recibirá 144.000 millones de euros.