Elecciones 20-N: ¿ Y si hablamos ya del futuro?
Ya no hay más excusas. Es el momento de hablar del futuro. Para el candidato Rubalcaba, porque pocas cosas del[…]
Ya no hay más excusas. Es el momento de hablar del futuro. Para el candidato Rubalcaba, porque pocas cosas del pasado le reconciliarán con ese electorado que le dio la espalda al PSOE en las últimas elecciones municipales y autonómicas. Su única oportunidad para obtener un buen resultado reside en hacer un discurso de futuro sin que se le relacione con el pasado.
Es el momento también de hablar del futuro para Rajoy, porque debe demostrar que la alternancia política es una de las grandes virtudes que ofrece la democracia, pero siempre que consiga una mínima ilusión entre la población. Nada habría mas dañino para la democracia y para cualquier candidato que ganar las elecciones sin generar una mínima ilusión. La ilusión sólo puede lograrse con un discurso mirando el futuro, aunque ello suponga hacer propuestas no populares. Nadie espera del líder el Partido Popular una estrategia política donde lo que mande sean las propuestas populistas, sino un proyecto de futuro tras el que se vislumbre una salida a la crisis, no sin un gran esfuerzo colectivo todavía.
En los tres meses y medio que quedan hasta las elecciones, vamos a comprobar que las expectativas de cambio político no cotizan en un mercado donde el presente económico está lleno de incertidumbres. Cualquier decisión de cualquiera de las compañías de calificación sobre cualquiera de los países periféricos tiene y tendrá más repercusiones en los mercados financieros que las declaraciones de Rodríguez Zapatero anunciando la fecha de los comicios. No deberán ignorar el presente, pero más valdrá a los candidatos,casi igual que a los inversores, que desde ahora hasta el 20 de noviembre traten de ignorar las vicisitudes que todavía han de protagonizar los mercados.