La caja única de las pensiones flirtea con la ruptura en el 2021
Siete comunidades podrían emular al País Vasco y pedir durante el 2021 la gestión del régimen económico de la Seguridad Social
2021 será un año clave para las pensiones en España. No solo porque el Gobierno pretende reformarlas antes de que termine el ejercicio con el objetivo de hacer sostenible el sistema.
En paralelo, la decisión de transferir al País Vasco la gestión del régimen económico de la Seguridad Social, prevista por Iñigo Urkullu para el próximo año, pondría en peligro la caja única de las pensiones y más cuando otras siete comunidades pueden "subirse al carro" y solicitar esta competencia.
Los estatutos de Cataluña, Navarra, Galicia, Andalucía, Comunidad Valenciana, Canarias y Baleares también recogen la transferencia de la gestión económica de la Seguridad Social por lo que si la solicitan, el Gobierno de Sánchez se vería obligado a concedérsela, igual que ha acordado con el País Vasco, lo que podría desequilibrar el sistema.
Así lo reconoce Gonzalo Núñez, profesor del Centro de Estudios Financieros (CEF), para quien esta cesión de competencias “será negativa para el sistema, porque, además de estar basada en motivos políticos, desestabilizará la Seguridad Social y abrirá la puerta a que otras comunidades autónomas la reclamen”.
Hasta ahora, pocas comunidades estaban interesadas en solicitarla debido al déficit que acarrea la Seguridad Social. Este año cerrará con un déficit récord cercano a los 45.000 millones de euros, lo que supone el 4,1% del producto interior bruto.
Pero tras la reforma de las pensiones, el Gobierno pretende equilibrar las cuentas del sistema traspasando los gastos impropios de la Seguridad Social, unos 22.800 millones de euros, a los presupuestos generales del Estado, con ello, según el ministro de Seguridad Social, José Luis Escrivá, “se acabaría con el déficit”, lo que animaría a más comunidades autónomas a demandar la transferencia.
"Una Seguridad Social sin deuda sería un imán que atraería a muchas comunidades autónomas", asegura Juan Carlos Higueras, analista económico y profesor de EAE Business School.
El precio del sí a los presupuestos
El PNV ha reivindicado esta competencia durante los últimos 40 años, pero los distintos gobiernos la han desoído hasta ahora.
Según los expertos, su concesión ha sido una de las monedas de cambio que el Gobierno de Sánchez ha tenido que pagar a Urkullu para que le apoyara en la votación de los presupuestos generales del Estado.
Un precio muy caro si se tiene en cuenta que esta concesión también puede suponer el inicio del fin de la igualdad territorial de la Seguridad Social.
Además de poner en jaque la caja única de las pensiones encargada de custodiar los ingresos por cotizaciones sociales del país para después repartirlos entre las comunidades autónomas según sus necesidades.
En opinión de Jesús Pérez, profesor del Instituto de Estudios Bursátiles (IEB), si el País Vasco y otras comunidades autónomas se hacen con la gestión de la Seguridad Social "sería la antesala del fin de la caja única de las pensiones, que ha logrado gran parte de la vertebración social y económica de España en los últimos cuarenta años".