La economía española se hundirá un 8% en 2020
La economía española se hundirá un 8%, según las previsiones del FMI. El paro alcanzará el 21%
La economía española se hundirá un 8% y el desempleo se disparará seis puntos, hasta el 20,8 %, en 2020, debido a la "crisis sin precedentes", así la ha calificado el Fondo Monetario Internacional (FMI), provocada por la pandemia del coronavirus.
De esta manera se cumplen los peores presagios para el PIB español, puesto que la caída del 8% es muy superior a la registrada en el peor año de la crisis financiera.
En concreto, en 2009, la economía española cayó un 3,6% en 2009 y un 2,9% en 2012, fecha coincidió con la crisis de deuda.
Antes de la pandemia, la economía española crecía a ritmos del 2%.
En cuanto al desempleo, la cifra facilitada por el FMI queda lejos del peor dato registrado en toda la seria histórica, que situó la tasa de paro en el 26,94% en el primer trimestre de 2013.
En el primer trimestre de 2014, el paró rondó el 25%, mientras que la tasa de paro, antes del coronavirus, se situaba en el 14,2%.
Las previsiones del organismo internacional son más pesimistas que otras instituciones, como por ejemplo Funcas, que calcula que la caída del PIB en 2020 será del 3%.
El FMI también ha señalado que el PIB de la eurozona también sufrirá los efectos económicos provocados por la pandemia del coronavirus a pesar de las medidas impuestas por el Eurogrupo y el BCE.
De acuerdo con los datos, la caída de la economía será mucho más abrupta que la vivida en la crisis financiera de 2008-2012.
El PIB de la zona euro se contraerá un 7,5% este año, según el Fondo, que calcula que, de entre las cuatro mayores economías de esta área, Italia es la que registrará una contracción mayor, ya que alcanzará el 9,1%; seguida de España, con una caída del 8%; Francia, con un 7,2%; y Alemania, con un 7%.
Estas tasas, como recuerda el FMI, no han sido vistas en Europa desde la Segunda Guerra Mundial.
La economía mundial caerá un 3%
La economía mundial se caerá un 3 % en 2020 por la significativa contracción en EE.UU., del 5,9 %.
Por su parte, China, donde empezó la pandemia, registrará un crecimiento del 1,2%. Este dato supone un brusco frenazo de la economía asiática puesto que viene creciendo a tasas del 6%.
El derrumbe económico será generalizado, según las previsiones del Fondo: el producto interior bruto del Reino Unido caerá un 6,5%; el de Rusia, un 5,5%; Sudáfrica, un 5,8%; Turquía, un 5%; Japón, un 5,2%, y Arabia Saudí, un 2,3%.
India, país emergente por excelencia, crecerá al 1,9%.
También el Covid-19 pasará factura a los países de América Central y del Caribe, puesto que su economía caerá un 5,2% para crecer a un ritmo del 3,4%.
La economía de México será la que más sufra al contraerse un 6,6%; la de Brasil un 5,3%; la de Argentina un 5,7%; la de Chile un 4,5%. Mención aparte merece Venezuela, con un descenso del 15%.
Medidas expansivas
Las previsiones del Fondo apuntan a una paulatina recuperación en 2021, a medida que la pandemia sea contenida, con un crecimiento del 5,8%.
Aunque este dato, como apunta el FMI dependerá del comportamiento de los consumidores, el ajuste de los mercados y la volatilidad de los precios de las materias primas.
También será determinante la respuesta de los bancos centrales y de los países a la crisis.
La Reserva Federal fue la primera en reaccionar anunciando compras ilimitadas y bajando los tipos, hasta en dos ocasiones, hasta situarlos en el 0%.
Por su parte, el Banco Central Europeo también lanzó dos programas de compras en dos tandas, al mismo tiempo que mejoró las barras de liquidez destinadas a los bancos.
Finalmente, el Eurogrupo sacó su bazuca al movilizar 500.000 millones de euros a través del MEDE, el BEI y un fondo destinado al desempleo.
No obstante, estas medidas han pasado factura a los spreads de los países periféricos debido al repunte de la deuda pública, que se situará por encima del 100% y a la dificultad de cumplir con el Pacto de Estabilidad, que establece un déficit, en el caso de España del 3%.
A estas medidas hay que sumarlas a las aprobadas por los Estados en forma de créditos para pymes y moratoria en el pago de impuestos y cotizaciones sociales.