no suben los precios, sube el petróleo
La estadística no está siendo una buena aliada para mostrar la realidad de la crisis. El indicador avanzado del IPC[…]
La estadística no está siendo una buena aliada para mostrar la realidad de la crisis. El indicador avanzado del IPC de noviembre estimaba que los precios han subido un 0,6% en el último año, algo que no ocurría desde principios de año. Pero, ¿en realidad han subido los precios o realmente ha sido la evolución del petróleo la que ha provocado este espejismo?
Hace un año, el barril de Brent se pagaba a 43 dólares. Hoy, por encima de los 78 dólares. Esto es, un incremento superior al 80% en apenas doce meses. Pero ni el calzado, ni el vestido, ni los restaurantes, ni los automóviles han incrementado su precio en el último año. Ni hay posibilidades objetivas de que lo hagan, al menos a corto plazo: el aumento del desempleo -y, sobre todo, las frágiles expectativas de quienes ahora conservan su puesto- lastra cualquier perspectiva de consumo. Será la evolución de la inflación subyacente -la que no incluye alimentos elaborados ni energía, por ser más volátiles- la que muestre el camino de la recuperación. Y, por ahora, no da síntomas de fortaleza.
Si a tres semanas de la Navidad, las cadenas de moda mantienen promociones, como si fuera enero; las aseguradoras de coches anulan el aumento de primas a sus asegurados, aun habiendo registrado algún siniestro este año; y las grandes hoteleras regalan una noche de hotel por cada día contratado, poco pueden haber subido los precios, a pesar de lo que diga la estadística.