Trump apunta al corazón de la UE con otra ronda de aranceles
Los Estados Unidos decidirán este miércoles si imponen nuevos aranceles a la UE. El vino y las aceitunas españoles, en peligro serio
Los Estados Unidos decidirán este miércoles si dan otra vuelta de tuerca a la guerra arancelaria que libran con la Unión Europea. Será cuando se conozca si el gobierno de Donald Trump impone nuevos aranceles a productos como el vino, la cerveza o las aceitunas.
La mano derecha de Trump en temas comerciales, Robert Lighthizer, tiene claro que los aranceles son el instrumento más contundente para forzar las negociaciones.Y el daño para España puede ser especialmente serio.
Pero en la medida en que el ejecutivo de Trump concibe los aranceles como un instrumento de presión política, a Lighthizer no le tembló el pulso para imponer recientemente tarifas sobre las importaciones de aluminio canadiense.
De poco importa que la economía estadounidense se haya visto arrasada por la pandemia del coronavirus. Y mucho menos que la hostelería luche por mantenerse a flote. El precedente de Canadá no augura nada bueno.
¿Cuáles son los orígenes del conflicto?
- El enfrentamiento se produjo por los subsidios que recibió Airbus. La Organización Mundial del Comercio (OMC) dictaminó en octubre que estas ayudas perjudicaban a Boeing.
- Por esta razón, la OMC aprobó que los Estados Unidos gravaran productos de la UE y del Reino Unido por 7.500 millones de dólares.
- Airbus anunció en junio que renunciaba a las condiciones preferentes en créditos concedidos por España y Francia. Con todo, los Estados Unidos aún barajan la posibilidad de seguir adelante. Lighthizer pretende que se devuelvan algunas ayudas.
¿A qué productos afectan los aranceles?
- Entre los productos que se podrían ver afectados están la ginebra británica, el whisky escocés o la cerveza alemana. Para España, los aranceles afectarían a la producción de vino y a la de aceitunas.
- La Administración estadounidense sopesa gravar estos productos con una tasa arancelaria del 100%, frente al 25% actual.
Con todo, existe la posibilidad de que Trump y Lighthizer den marcha atrás y no abran este frente de batalla. Las consecuencias para Europa serían muy duras pero tampoco se libraría la economía estadounidense.
Al igual que sucede en el resto del mundo, la hostelería es uno de los sectores más perjudicados por la pandemia.
Las pautas de distanciamiento social están reduciendo las ventas de los restaurantes, incluidos los de los Estados Unidos. Y con estas medidas proteccionistas, verán encarecidos aún más sus productos.
Eso sí, hasta ahora, la administración Trump rechazó hasta ahora negociar un acuerdo con Bruselas hasta en tres ocasiones. Así que la batalla se prevé dura.