Bitcoin: la última oportunidad para comprar... o para salir corriendo
El suelo del bitcoin en los 30.000 dólares puede no ser el definitivo. Los analistas consulados por finanzas.com anticipan más volatilidad
La cotización del bitcoin resistió por encima de los 30.000 dólares al crack de terra, al que la revista Inversión dedica esta semana su portada. Se trata de una zona relevante que todavía aguanta pese a que el bitcoin acaba de firmar su séptima semana de caídas. Y ha generado un fuerte debate entre los analistas.
La racha de pérdidas semanales más larga desde 2011 coincidió en la caída del S&P 500, que también logró esquivar a última hora el temido mercado bajista.
A pesar de este asedio vendedor, la resistencia del bitcoin en estos niveles desató las discrepancias entre los expertos. La cuestión es si los bajistas tendrán fuerzas para seguir presionando o si bien tirarán la toalla y permitirán el rebote.
El suelo del bitcoin, a debate
La primera gran cuestión es si el bitcoin está haciendo o no un suelo. Por el momento, “los indicadores técnicos muestran señales contradictorias, mientras que los mercados de criptomonedas se mueven en sincronía con el mercado financiero tradicional”, dijeron en Bitpanda.
Parece difícil que el bitcoin vaya a encontrar la calma sin la colaboración de la bolsa estadounidense. Por eso, el suelo del bitcoin debería ir ligado al del S&P500. Y algunos ya están viendo los últimos estertores bajistas.
"Si el S&P500 cae un poco más debería crear una gran oportunidad de compra para el bitcoin", dijo Mark Newton, estratega técnico de Fundstrat Global. Su argumento gira en torno a la idea de que el pesimismo es tan elevado, que el punto de inflexión estaría a la vuelta de la esquina.
Todo lo contrario opina Alberto Toribio, embajador de Cryptoplaza: “Yo no afirmaría que hemos tocado suelo, y aunque lo hayamos hecho, tampoco tengo claro que no vayamos a iniciar un ciclo de invierno”, dijo este experto a finanzas.com.
“La tendencia es claramente bajista por el momento, y no hay nada en el análisis técnico ni tampoco en los fundamentales que nos indique que esto ha cambiado”, recalcó Toribio.
El miedo a la inflación
El problema que amenaza al bitcoin es el mismo que trae de cabeza al resto del mercado, es decir, el miedo a la inflación. Con los precios lejos de estar bajo control, el riesgo es que la Fed decida incrementar el ritmo de ajuste monetario.
Además, el colapso de terra desató los temores a una nueva oleada regulatoria, con algunas voces de mucho peso, como la de la presidenta del BCE, Christine Lagarde, diciendo directamente que las criptomonedas no valen nada y deberían ser reguladas.
La cuestión es que todos estos elementos han conformado un entorno de extrema aversión al riesgo, lo que complica aun más las decisiones de inversión.
Históricamente, “comprar en regiones de miedo extremo ha sido más rentable que vender o vender en corto en fases bajistas profundas”, dijeron en Bitpanda.
Sin embargo, “el proceso de tocar fondo después de una gran caída puede llevar mucho tiempo para absorber toda la negatividad”, recordaron estos expertos.
Poca actividad criptográfica
Uno de los indicadores que mejor mide el apetito de los inversores son los precios del gas, que en el argot del mundo cripto hacen referencia a las comisiones por operaciones. El problema es que estos precios “están por los suelos”, apuntó Toribio.
Es más, otras tesis basadas en los ciclos de ‘halving’ (que es la reducción a la mitad de la remuneración que reciben los mineros) sugieren que el bitcoin aún podría alcanzar los 18.000 dólares antes de recuperar la senda alcista, apuntó el experto de Cryptoplaza.
En el polo contrario, los únicos argumentos que manejan los cripto creyentes tienen más que ver con un acto de fe que con los motivos reales para el rebote.
Es el caso de Mati Greenspan, presidente Quantum Economics y ferviente defensor del bitcoin, que comparó a la moneda con uno de los muchos artículos que se pueden encontrar en la cesta de saldos de cualquier comercio.
“Se puede comprar el bitcoin literalmente a la mitad del precio que la gente pagaba hace sólo seis meses, cuando todo el mundo estaba haciendo cola para comprar”, dijo Greenspan.
El matiz es que nada ha cambiado. “No hay anuncios regulatorios, ni fallos tecnológicos”, este bitcoin y el de hace seis meses es exactamente el mismo, concluyó este experto.
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