El dólar, protagonista en la escalada de la inflación
El billete verde vuelve a ser un refugio contra el descontrol de la inflación. El intercambio con el euro llega a máximos anuales para el dólar, en los 1,1450
El precio del pavo, la comida por excelencia en los Estados Unidos para Acción de Gracias, llegó a máximos históricos, fiel reflejo de la escalada de la inflación. El índice de precios al consumo (IPC) llegó en octubre a su mayor dato en los últimos 30 años, el 6,2 por ciento.
“Que haya un poco de inflación, en torno al 4 por ciento, siempre se ha dicho que es bueno. A partir del 6 por ciento, la situación se complica”, explica Josep Codina, analista jefe de la revista Inversión.
Sin embargo, el experto apunta que esta vez, el dólar sí está volviendo a actuar como refugio de los inversores en tiempos de incertidumbre inflacionaria.
En máximos anuales
El euro/dólar llegó esta semana a sus máximos anuales para el billete verde; mínimos para la moneda comunitaria. Marcó los 1,1450 al cambio.
Algo directamente relacionado con precio de alimentos como el pavo. “Por la inflación, los bonos bajan de precio, eso hace que la gente quiera estar en posición de una moneda fuerte”, explica Josep Codina.
“La inflación que puede haber provocado la subida del pavo puede también haber hecho que se haya fortalecido el dólar”, indica el experto.
Junto al dólar, el analista destaca que normalmente tienen una correlación negativa, lo que refrenda la pauta estacionaria que atraviesa el metal.
Pese a ello, el precio de la onza, que se sitúa en los 1.865 dólares ahora, estaría buscando acercarse a sus máximos anuales en los 1.880-1.890 dólares.
La lectura positiva de la inflación
El aumento de la inflación por encima de las previsiones del consenso de analistas volvió a dejar temores en las bolsas.
Wall Street se movió en rojo en la siguiente sesión tras conocer la cifra, mientras que el IBEX 35 cerró la semana con pérdidas del 0,5 por ciento. Caídas que profundizó en la recta final de la semana, volviendo a coquetear con el nivel de 9.000 puntos.
“La lectura positiva está en que ahora mismo solo tenemos un dato, el de este mes. Los bancos centrales piensan que la situación es transitoria, y que el pico, si no se ha producido ya, venga en los próximos tres meses”, explica Codina.
La clave, de acuerdo al analista, será atender a las rentabilidades de las bolsas y los bonos si finalmente no se produce ese pico.
Con el dato de confianza inversora de la Universidad de Michigan en mínimos de los últimos diez años, las alarmas, por el momento, no habrá que conectarlas.