El ether se pertrecha para mantener vivos sus máximos
El ether comienza diciembre con una nueva subida, que da continuidad a su rally alcista
Noviembre ha sido un mes de récords para el ether, y la segunda criptomoneda más grande del mercado ha comenzado diciembre con un impulso que aviva las esperanzas de los inversores más alcistas.
La moneda de la blockchain Ethereum puso en marcha el último mes del año registrando una subida de en torno al 6 por ciento hasta los 4.700 dólares (4.150 euros).
Una escalada que podría tacharse de flor de un día, considerando el contexto de alta volatilidad que viven las criptodivisas y el hecho de que a lo largo del día el incremento se haya relajado hasta el 1 por ciento.
En este caso, no obstante, los números verdes del ether suponen dar continuidad a un incremento de hasta el 13 por ciento en el último mes, y del 750 por ciento en el último año.
Récord tras récord en noviembre
El ether comenzó noviembre aupándose hasta casi los 4.700 dólares, barrera que rompió tan solo una semana después para superar los 4.800 dólares, un máximo histórico que los analistas, sin embargo, consideraron que serviría como punto de apoyo psicológico para que la criptomoneda se lance a por los 5.000 dólares.
Ahora, tras una severa corrección de vuelta hasta los 4.000 dólares vivida desde el 16 hasta el 29 de noviembre, la moneda ha encadenado tres días de alzadas que permiten abonar el suelo para una nueva ruptura en lo más alto.
Alejandro Zala, director nacional de Bitpanda en España, explica a finanzas.com que en la corrección general del mercado cripto durante la semana pasada, los alcistas del ether "se mostraron fuertes en el nivel de soporte de 3.500 euros (4.000 dólares) y empujaron el precio hasta rozar los 4.000 euros (4.500 dólares)".
Ahí estuvo la lucha entre alcistas y bajistas que se mantuvo durante un par de días, afirma Zala, hasta que el domingo "comenzó un rally destacado de precio" prolongado hasta este miércoles, en el que la criptodivisa vuelve a rozar su máximo histórico registrado en la primera quincena de noviembre.
La hermana pequeña comienza a remar sola
La subida del ether llega en un mes en el que bitcoin se hundió un 20 por ciento desde máximos como consecuencia de la volatilidad causada por la nueva variante ómicron del coronavirus.
Pese a que la criptodivisa más popular del mercado volvió a recuperar terreno para alcanzar los 57.000 dólares, el mercado parece al fin disociar los destinos de bitcoin y ether, cuyos movimientos en los intercambios han estado hasta ahora muy interrelacionados.
El banco estadounidense JP Morgan, por ejemplo, argumentaba en su último informe sobre criptoactivos que la red Ethereum tiene una mayor capacidad para desarrollar un papel de liderazgo en las finanzas descentralizadas.
La conclusión de JP Morgan se produce ante la capacidad de Ethereum para convertirse en la cadena de bloques preferida para aunar los distintos proyectos de metaversos para el auge de las finanzas descentralizadas.
Es decir, que la mayor variedad de usos del sistema en que se negocia con el ether convierten a la criptodivisa en un activo más atractivo.
El mundo virtual hace al ether más real
Siguiendo ese mismo informe, la directora del departamento de Finanzas, Contabilidad y Control de la Universidad Pompeu Fabra, Luz Parrondo, comparaba el surgimiento del ether en relación con el bitcoin con la fábula de la tortuga y la liebre.
Y el ether, tanto por su papel como criptodivisa de una plataforma que puede convertirse en el motor de verificación de contratos o propiedad en el metaverso, como por el hecho de que sirve para financiar las compraventas de los pujantes NFT, es la tortuga que avanza lenta pero inexorablemente.
Lo hace, además, en comparación con el blockchain de un bitcoin cuyo rango de acción se limita, por el momento, a la compra y venta de la propia moneda.
La señal que parece mandar el mercado, por tanto, es que las dos criptodivisas están listas para recorrer caminos independientes, con el bitcoin consolidando su rol como valor refugio, y el ether sustentando una red Ethereum cuyo papel se intuye como fundamental en la red 3.0.
