El ether se dispara: qué implica la nueva actualización tecnológica
La nueva actualización de la red Ethereum, bautizada como “London”, se acaba de completar con éxito e impulsa la cotización del ether
El ether se disparó hasta los 2.800 dólares y alcanzó máximos de dos meses tras concluir con éxito la actualización técnica de la red Ethereum bautizada como “London”. El nuevo desarrollo supondrá un recorte de las monedas en circulación.
Este nuevo lavado de cara, del que ya informó INVERSIÓN en un extenso reportaje sobre la guerra de criptodivisas, generó mucha polémica entre mineros y desarrolladores, al cambiar las reglas con las que se decide el pago de comisiones en la red.
Conocida formalmente como ‘Ethereum Improvement Proposal’ (EIP 1559), la nueva actualización propone eliminar la tarifa base que pagan los usuarios de la red para procesar transacciones.
Como estas monedas ya no se pagan, se eliminan directamente de la circulación, lo que en el argot se conoce como ‘quemar’. Una vez quemadas, la oferta monetaria de ethers se reducirá un 4 por ciento anual.
Para la red Ethereum es un desarrollo clave, la piedra angular sobre la que construir el futuro de una moneda que muchos creen que a largo plazo superará al bitcoin por sus aplicaciones al mundo real.
La política monetaria deflacionaria impulsa al ether
De esta forma, la primera gran implicación que trae la actualización “London” es que la política monetaria que gobernará la moneda será deflacionaria. Esto significa que se queman más monedas que las que se emiten. Es el principio de la escasez en su máxima expresión.
La noción de que el ether “se convierta en una criptomoneda deflacionaria en el futuro ahora es tangible, y los efectos en la valoración podrían ser profundos”, dijo Martin Gaspar, analista de la firma Cross Towers.
A juicio de Alexandre Lores, analista de Quantum Economics, “la mayor escasez del ether aportará valor a largo plazo”. Es más, este experto se mostró optimista incluso a corto plazo, aún cuando lo normal sería ver alguna corrección tras el fuerte rebote del ether.
El éxito de la actualización ‘London’ es un alivio para la red Ethereum
Otra implicación importante del nuevo desarrollo técnico es que se ha podido completar con éxito. Parece una trivialidad pero no lo es.
No habría sido raro que una transformación tecnológica de este calado hubiese generado toda una serie de dolorosos problemas técnicos con potencial para impactar a toda la red Ethereum. Pero no es lo que ha sucedido.
Sí es cierto que para los mineros no es la mejor noticia, porque se está reduciendo su remuneración. Pero sabían que ocurriría desde hace tres años. Además, los expertos creen que a largo plazo saldrán beneficiados en la medida en que se revalorice la cotización del ether.
Los que sin duda saldrán beneficiados son los usuarios de la red. Los tiempos de las transacciones serán menores y las tarifas que pagan más previsibles, además de que habrá menos fallos.
El paso previo a Ethereum 2.0
Más allá de estas cuestiones, lo cierto es que el éxito de la actualización “London” se enmarca en el mercado como el paso previo a otro desarrollo tecnológico todavía más importante, Ethereum 2.0.
Cuando este desarrollo entre en funcionamiento, previsiblemente el año que viene, se podrá solucionar el gran problema de la red Ethereum, la escalabilidad, lo que se traduce en que las operaciones son caras y lentas.
Se pasará de un sistema basado en el sistema de “prueba de trabajo” a otro cimentado en la “prueba de participación”.
Es decir, para ser influyente en la red no habrá que tener un ordenador muy potente. Bastará con agrupar una cierta cantidad de monedas. En concreto, 32 ethers. Por esta razón, es previsible que aumente la demanda de la moneda digital.
Actualmente, el gran problema de la red consiste en que las operaciones no se pueden escalar. Cuesta lo mismo mandar 10 dólares que enviar un millón. Con Ethereum 2.0 este problema será historia. Estará solucionado el problema de la escalabilidad.