El ether superará al bitcoin por sus aplicaciones al mundo real
Los casos de uso de la red Ethereum tienen más potencial que el bitcoin, según estima Goldman Sachs
El ether está en posición de superar al bitcoin como depósito de valor, según estimaron los analistas de Goldman Sachs.
Esta es la moneda de la cadena de bloques de la red Ethereum, una plataforma alternativa a la red del bitcoin.
De acuerdo con Goldman Sachs, las aplicaciones en el mundo real de la cadena de bloques Ethereum tienen mayor potencial que el bitcoin.
Mientras que el bitcoin solo sirve para pagar, la red Ethereum es más popular para el desarrollo de los contratos inteligentes.
El ether es una moneda con más aplicaciones en el mundo real
Por ejemplo, si dos usuarios quieren regular la compraventa de una vivienda, pueden establecer las cláusulas mediante estos contratos, forma de pago, plazos, penalizaciones o vicios ocultos. Con el bitcoin solo se podría pagar.
Esta mejor aplicación de la red Ethereum al mundo real es lo que impulsó el desarrollo de loa que se conoce como finanzas descentralizadas (DeFi). Es la meta del mundo criptográfico. Poder hacer negocios sin la presencia de intermediarios, de manera segura y fiable.
Por esta razón, los analistas de Goldman Sachs consideraron que, aunque el bitcoin puede tener la marca más fuerte, por ser la primera moneda digital en llegar al mercado, carece de las aplicaciones a la economía real que sí tiene el ether.
De hecho, el ether se lo está poniendo muy difícil al bitcoin en la guerra de criptodivisas que libran ambas monedas, según explicó la revista INVERSIÓN en un extenso reportaje.
El ether y el bitcoin no podrán superar al oro
En todo caso, ninguna de las dos criptodivisas se puede comparar con el oro como reserva de valor, explicaron en Goldman Sachs.
Uno de los catalizadores alcistas que impulsó al bitcoin en los últimos meses es la creencia entre los gestores de fondos de que la moneda digital podría proteger las carteras cuando la inflación se mueve al alza.
La subida de los precios provoca que el dinero pierda valor. Por eso, el activo refugio por excelencia es el oro. Es lo que se conoce como depósito de valor.
En el mercado existe un feroz debate respecto al papel del bitcoin como depósito de valor alternativo al oro. Pero en Goldman Sachs consideran que ni esta moneda digital ni el ether podrán hacer sombra al oro en este papel.
El rally del ether alcanza ya el 215 por ciento
Los comentarios de Goldman Sachs impulsaron esta madrugada al ether, que se anotó una subida del 3 por ciento. En lo que llevamos de año, su revalorización ronda el 215 por ciento.
De hecho, el ether es una de la ‘altcoins’ más populares entre las monedas que ganan este año más que el propio bitcoin.
Es una moneda que flaquea más que el bitcoin respecto a su adopción institucional pero su tecnología está atrayendo cada vez más interés.
Sin ir más lejos, el Banco de Israel anunció hace unos días que está estudiando el uso de la red Ethereum en pruebas internas con su criptodivisa, el shekel digital.
Además, en otra prueba de mayor madurez, el Banco Europeo de Inversiones anunció esta primavera el lanzamiento de un bono digital por 100 millones de euros basado en la red de Ethereum.
En España, el Ministerio de Asuntos Económicos y Transformación Digital acaba de dar luz verde a la financiación de empresas con tokens en la red Ethereum.
El ether es la punta de lanza del ecosistema DeFi
La cuestión es que muchos expertos consideran que la tecnología de la red Ethereum es superior, por cuanto introduce el concepto de propiedad digitalizada y permite el desarrollo de los contratos inteligentes.
De esta forma, esta cadena de bloque se ha convertido en la punta de lanza del ecosistema de las finanzas descentralizadas (DeFi).
Mientras que el bitcoin solo sirve para hacer pagos, el universo de aplicaciones de las finanzas descentralizadas es mucho más extenso. Y es precisamente este mayor uso a nivel global lo que ha impulsado el precio del ether.
Además, la red Ethereum prepara una serie de importantes desarrollos tecnológicos que implicarán una reducción de la oferta monetaria, lo que supondrá un catalizador alcista para las cotizaciones.
