Los problemas de FTX se empezaron a incubar tras el colapso de terra
FTX sufrió fuertes retiradas de monedas desde junio, tras el colapso de terra y el fondo Three Arrows Capital (3AC).
Los problemas del broker FTX se empezaron a incubar tras el colapso de terra y la caída del fondo Three Arrows Capital (3AC), eventos a los que siguió una fuerte salida de fondos en las cuentas del ‘exchange’.
Entre abril y mayo, las reservas en bitcoins de FTX alcanzaron las 102.000 monedas, pero a finales de junio esta cantidad “disminuyó drásticamente” en un 51,3 por ciento, dijo la consultora de investigación criptográfica Glassnode en un informe.
Desde entonces, las reservas han disminuido persistentemente hasta llegar efectivamente a cero durante el pánico de esta semana.
A medida que salen a la luz “las denuncias de apropiación indebida de depósitos de clientes de Alameda”, esto indica que la entidad Alameda-FTX puede “haber experimentado un grave deterioro del balance en mayo-junio” tras el colapso de terra, 3AC y otros prestamistas, dijo Glassnode.
En este sentido, las reservas del ethereum mantenidas en el broker experimentaron dos periodos de caída “significativa”, explicó la consultora.
El primero fue en junio, donde se desplomaron un 55 por ciento y el segundo esta semana, cuando se retiraron 611.000 criptomonedas, lo que deja el descenso en un 99,5 por ciento. Ahora, solo quedan 2.800 monedas de etherem en las billeteras de FTX, frente a los 1,18 millones que había en junio.
El daño a la reputación de la industria causado por FTX
Lo cierto es que la bancarrota supone “un tremendo golpe para la industria”, al dejar “atrapados los fondos de millones de clientes”, añadió Glassnode. Supone un daño en los “muchos años de reputación constructiva” de la industria y crea “nuevos riesgos de contagio”.
Los datos recopilados por la consultora sugieren que los problemas comenzaron a incubarse antes del verano, cuando el fundador de FTX, Sam Bankman-Fried (SBF), estaba en la cresta de la ola.
“Sin duda el evento de 3AC y el de terra afectaron a FTX, ya que tenía exposición a mercado mediante préstamos”, explicó a finanzas.com Alberto Toribio, embajador de Cryptoplaza.
Ahora bien, tampoco hay que pensar que el broker estaba quebrado a comienzos del verano, añadió Toribio. “Todas las compañías toman deuda, y claramente el nivel de apalancamiento de FTX era arriesgado, pero lo que puso en quiebra su balance fueron dos eventos muy concretos”, subrayó.
En primer lugar, el foco recayó en FTX y sus préstamos con Alameda Research tras el tuit de Champeng Zhao (CZ), el CEO de Binance, dijo Toribio.
Esto “hizo que el mercado ajustase la valoración del token FTX, pero entrando en pánico y probablemente valorándolo muy por debajo de sus fundamentales. FTX tenía muchos flujos de caja positivos que revertían en el token”, recalcó el embajador de Cryptoplaza.
Por el contrario, Binance afirmó que no tuvo nada que ver con la quiebra de FTX, según declaró el vicepresidente para asuntos corporativos, Daniel Trinder. “En absoluto era la intención”, declaró el ejecutivo ante los legisladore británicos mientras se comprometió a aportar pruebas para respaldar esta afirmación antes del 15 de noviembre.
El pánico se dispara
En segundo lugar, FTX tuvo que hacer frente a solicitudes de retirada por más de 6.000 millones de dólares en apenas 72 horas. Una corrida bancaria de este calibre “afectaría incluso a la empresa financiera más solvente del sector tradicional”, expuso Toribio.
Ahora bien, de este análisis no se desprende que lo que le ha ocurrido a FTX podría pasarle a cualquiera. “Solo ocurre a aquellas empresas muy apalancadas contra activos de mucho riesgo”, recalcaron las fuentes consultadas.
El resultado por ahora es que al menos han desaparecido 1.000 millones de dólares en fondos de los clientes de FTX, en una quiebra que involucra a más de un millón de acreedores.
Antes de declararse la quiebra, Sam Bankman-Fried, conocido también como el barón de las criptomonedas, intentó levantar fondos entre distintos inversores, lo que incluyo rivales como Coinbase o Kraken, según informó The Wall Street Journal.
Es más, durante el verano, cuando las tenencias de bitcoins y ethereum ya habían caído con fuerza, SBF intentó recaudar sin éxito 1.000 millones de dólares con el objetivo de comprar empresas aprovechando la recesión, dijo el rotativo estadounidense. Incluso llegó a visitar a inversores de Oriente Medio en las semanas previas al colapso.
