La ilegalización de China se ceba con el ether

Los inversores en criptodivisas siguen asimilando y analizando las implicaciones de la decisión de China de ilegalizar cualquier tipo de operación criptográfica y las cotizaciones de las criptodivisas se resienten con fuerza. 

De las dos más seguidas y operadas, bitcoin y ether, es en esta última donde el daño en la sesión está siendo mayor con unas caídas que rondan el 10 por ciento y llevan al criptoactivo a perder los 2.800 dólares por unidad. 

El bitcoin, que también ha registrado a lo largo de la sesión caídas de calado, intenta estabilizar las ventas sobre el 5 por ciento de caída, lo que lleva la criptomoneda a sostener los 42.190 dólares por bitcoin, se trata de niveles de primeros de agosto donde también cotizó sobre los 41.000 dólares. 

Para el resto de critpodivisas menos conocidas para la comunidad financiera general, pero sí operadas por la comunidad de inversores en criptoactivos –EOS, Litecoin o Dash- las pérdidas rondan entre el 8 por ciento y el 10 por ciento.

“Atentado al patrimonio y estafa piramidal” 

Pekín defiende la prohibición argumentando que se trata de productos que “atentan contra el patrimonio de los ciudadanos y consisten en una estafa piramidal”, por ello, todas las transacciones son ilegales. 

Por ello, el Banco de China prohíbe también las casas de intercambio internacionales que ofrecen sus servicios a clientes chinos y aunque se permite la posesión de las mismas, enfatizó que la presión aumentará al detectar un uso delictivo de las mismas o recaudaciones ilegales de fondos. 

“El Gobierno reprimirá decididamente la especulación con monedas virtuales, así como las actividades financiaras relacionadas y las conductas indebidas con el fin de salvaguardar las propiedades de las personas y mantener el orden económico, financiero y social”, completa el Banco de China en su comunicado.

Golpe directo al corazón de la minería 

Las medidas afectan también a la minería, como se conoce al proceso de creación de criptodivisas, pues también se ilegaliza y la erradicación de la minería es calificada como una tarea “urgente” para el Gobierno. 

El motivo reside en que el gigante asiático es uno de los corazones mundiales de la creación de critpomonedas y la proliferación de granjas, como se conoce a los centros donde los mineros de criptoactivos trabajan, se ha disparado. 

Esto ha supuesto un importante incremento de las emisiones de carbono del país que complican el cumplimiento de los acuerdos nacionales e internacionales al respecto pues el 46 por ciento de ‘hash global’, media informática para calcular la potencia usada en minería y procesamiento, corresponde a China.