Pharmamar aumenta su caja con 100 millones de dólares por la lubirnectedina
Pharmamar recibirá “royalties” por un máximo del 30% sobre las ventas netas de este antitumoral que comenzará a comercializarse en julio en Estados Unidos
Pharmamar sigue estirando su caja. Aunque el mercado ha puesto el foco en las expectativas generadas en torno al Aplidin, su fármaco contra el coronavirus, es su antitumoral de lubirnectedina el que, de momento, hace aumentar su capital.
La farmacéutica que dirige Jose María Fernández de Sousa recibió este lunes 100 millones de dólares de Jazz Pharmaceuticals, su socio al otro lado del Atlántico. Esta cantidad corresponde a un primer pago por la aprobación de la lurbinectedina en los Estados Unidos para el tratamiento de pacientes con cáncer de pulmón microcítico metastásico.
Este compuesto químico fue autorizado por la Administración de Medicamentos y Alimentos (FDA, por sus siglas en inglés) el pasado 15 de junio bajo la regulación ‘accelerated approval’, que consiste en la aprobación condicional de un fármaco por la vía rápida dado que se trata de un medicamento que cubre una necesidad médica no satisfecha.
Esta fase permitirá a Jazz comenzar la venta de la lurbinectedina, bajo la marca de Zepzelca, en Estados Unidos este mismo mes de julio.
Una vez que se produzca el “full approval”, es decir, la aprobación total, la compañía gallega podrá recibir otros 150 millones adicionales, según informó este lunes.
30% de 'royalties'
El acuerdo previo entre Jazz y Pharmamar contemplaba que la española podría obtener hasta 550 millones de euros en función a los hitos regulatorios y objetivos comerciales. Recibirá también “royalties” por un máximo del 30% sobre las ventas netas, pero mínimo siempre de doble dígito.
El fármaco se administrará bajo la fórmula de monoterapia, en segunda línea de tratamiento contra el cáncer de pulmón. En este caso, uno de los más agresivos que se diagnostica a 30.000 personas cada año en los Estados Unidos, de los que 18.000 llegan a segunda línea.
Y, es por tanto, a esos pacientes que llegan a segunda línea a los que se podrá administrar el medicamento desarrollado por la empresa española, que está a la espera de aprobación en Europa. Mientras, la autorización estadounidense le abre la puerta a Pharmamar a un mercado de 1.000 millones de dólares
Nuevos ensayos clínicos en China
Pharmamar también comunicó este lunes, junto con su socio en China, Luye Pharma Group, que la solicitud de ensayo clínico de lurbinectedina ha recibido la aceptación formal del Centro de Evaluación de Medicamentos (CDE, Centre for Drug Evaluation) de la República Popular China.
Con esta aceptación, se permite a Luye Pharma iniciar nuevos ensayos clínicos con lurbinectedina en la población china, ya que es un requisito de las autoridades reguladoras.
En abril de 2019, PharmaMar y Luye Pharma firmaron un acuerdo de licencia de desarrollo y comercialización con respecto a lurbinectedina por el que la gallega recibió cinco millones de dólares.
Según los términos del acuerdo, la farmacéutica asiática está comprometida a desarrollar lurbinectedina para el tratamiento del cáncer de pulmón microcítico en China, mientras que Pharmamar conserva los derechos exclusivos de producción del compuesto.
Según datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS), China es el país con mayor número de casos de cáncer en el mundo, debido al envejecimiento de la población, el tabaco y la contaminación. China es también el país con la tasa de mortalidad más alta de Asia por cáncer de pulmón.
A la espera del Aplidin
El mercado también valora que en las cuentas no se refleje aún las ventas del Aplidin. Los ensayos clínicos de este fármaco van viento en popa, según la compañía. El director general de Pharmamar, Luis Mora adelánto que los resultados de la fase I "están siendo asombrosos”. “La potencia antivirual del Aplidin es mil veces superior a la del fármaco Remdesivir”, recalcó respecto al tratamiento de su rival de Gilead Sciences.
No obstante, la aprobación de este medicamento se demorará, como mínimo, hasta enero de 2021. Será entonces cuando, en el mejor de los casos, podría comenzar la comercialización si supera todas las fases clínicas con éxito.
Las estimaciones de la compañía que apuntaban a que 2020 sería un año “excepcional” se están cumpliendo y esquivaría así los retrasos en la aprobación de otros medicamentos o los pagos con retrasado de las administraciones al estar enfocadas estas en el coronavirus, pero ahora pueden respirar gracias a la liquidez lograda.