Centrales sindicales de Brasil apoyan la huelga de empleados de Petrobras

Las seis mayores centrales sindicales de Brasil anunciaron hoy su respaldo a la huelga que realizarán a partir del miércoles los empleados de las empresas petroleras, incluyendo Petrobras, pese a la crisis de desabastecimiento que el país vive por el paro de los camioneros.

"Entendemos que las reivindicaciones de los empleados de las petroleras son justas y señalan la necesidad de proteger a Petrobras de la especulación financiera y de su venta a multinacionales", según un comunicado conjunto firmado por los presidente de las seis centrales.

Los sindicatos manifestaron su "apoyo y solidaridad" a la huelga de tres días anunciada por los empleados de las petroleras a pesar de la crisis que vive el país tras nueve días de paro de camioneros, que atribuyeron a la falta de habilidad política y de sensibilidad social del Gobierno para negociar con los huelguistas.

La Federación Única de los Petroleros (FUP), que agrupa a la mayoría de los sindicatos de empleados del sector, ha convocado una huelga de 72 horas de "advertencia" y como respaldo a la petición de los camioneros de que la estatal Petrobras reduzca los precios de los combustibles, que se han disparado con las turbulencias en los mercados internacionales de crudo.

La huelga, según la FUP, también busca la renuncia del presidente de Petrobras, Pedro Parente, y denunciar las supuestas maniobras del Gobierno para vender activos de la mayor empresa de Brasil a multinacionales o privatizarla.

El lunes, en una carta a los trabajadores, el presidente de la petrolera les pidió que reflexionen sobre la conveniencia de la huelga, que puede agravar los efectos del paro promovido por camioneros.

Aunque gran parte de los camioneros ha vuelto al trabajo, algunos mantienen las carreteras bloqueadas, lo que ha impedido normalizar el abastecimiento de combustibles, alimentos, materias primas y hasta insumos para hospitales.

Tanto Petrobras como la Abogacía General de la Unión (AGU, órgano de consultoría jurídica de la Presidencia) presentaron recursos ante el Tribunal Superior del Trabajo (TST) para que declare ilegal la huelga de los empleados de las petroleras y les imponga multas a los sindicatos que insistan en la iniciativa.

Según los demandantes, la paralización será "abusiva" por amenazar los derechos fundamentales de toda la sociedad y "nula" por presentar reivindicaciones políticas y no laborales, como la renuncia del presidente de la estatal.

Para los denunciantes, una paralización de la producción de combustibles agravaría la ya delicada situación de abastecimiento de hospitales, mercados y escuelas.

El ministro de la Presidencia de Brasil, Eliseu Padilha, afirmó la víspera que el Gobierno "ni analizará" una posible dimisión del presidente de la estatal, quien según dijo, igual que el presidente Temer quiere hacer a la compañía de nuevo, "una de las mayores petroleras del mundo".