Curevac suma un nuevo socio para fabricar su vacuna antiCovid
El grupo suizo Novartis engrosa la lista de colaboradores que desarrollarán la vacuna de la farmacéutica alemana Curevac
Curevac y Novartis anunciaron este jueves un acuerdo para producir 250 millones hasta 2022 de la vacuna antiCovid de la farmacéutica alemana, que se encuentra bajo revisión de la Agencia Europea del Medicamento (EMA) junto a la de la estadounidense Johnson & Johnson.
Novartis espera entregar un total de 50 millones para finales de 2021. En 2022 llegarían los 200 millones de dosis restantes, según indicó el grupo suizo en un comunicado.
De esta forma, Curevac suma un nuevo nombre en su lista de colaboradores para la fabricación de su tratamiento, que cuenta con compañías como Bayer, gigante de la industria farmacéutica alemana, la británica GlaxoSmithKline (GSK) o la francesa Fareva.
Más arsenal para Europa
La alianza reforzará, además, la producción en territorio europeo ya que comenzará la producción de las dosis a partir del próximo verano en su fábrica de Kundl.
Curevac se convertirá en uno de los grandes suministradores de vacunas para la Unión Europea. El presidente de la farmacéutica, Franz-Werner Haas, dijo a finales de febrero que espera duplicar la producción en 2021 hasta los 600 millones de dosis gracias al acuerdo con Bayer.
Tras la alianza con Novartis, Curevac produciría en torno a 1.200 millones de dosis para 2022, según las estimaciones realizadas por Haas en febrero, cuando calculó un total de 1.000 millones de vacunas a lo largo del próximo año.
“Junto a Novartis esperamos aumentar significativamente nuestra capacidad de fabricación y situar nuestra red de producción sobre una base más amplia”, explica Florian von der Mülbe, director de producción de Curevac.
Caídas en bolsa
El anuncio del acuerdo tuvo, sin embargo, un efecto negativo para la cotización en bolsa de ambas compañías.
Las acciones de Curevac cayeron este jueves un 4% hasta el entorno de los 80 dólares, su nivel más bajo desde noviembre.
Los títulos de Novartis, por su parte, se dejaron más de un 3% en la última sesión hasta los 78 francos suizos.
Tras subir con fuerza en 2020 arrastradas por el rendimiento general del sector, la farmacéutica alemana apenas repunta un ligero 0,4% en el acumulado del 2021 mientras que el laboratorio suizo se deja un 8%.
Niveles que, junto al mayor protagonismo que adquieren ambas compañías en la carrera contra la pandemia, ofrecen una oportunidad para tomar posiciones en los valores.
Un estudio de la gestora Alliance Bernstein calcula que el valor de la industria de las vacunas antes de la pandemia era de aproximadamente unos 35.000 millones de dólares. Tras la crisis sanitaria, la progresión del sector podría lanzar el sector hasta los 105.000 millones en los próximos cinco años.
La unión hace la fuerza
“La propia industria está consolidada gracias a los enormes costes de entrada, las problemáticas cadenas de suministro y la complejidad de fabricación”, apunta Dani Brinker, responsable de carteras e inversión de eToro.
Según el analista, cuatro compañías acaparan el 85% del mercado de vacunas: Sanofi, GSK, Merck y Pfizer, cuya vacuna, la que mayor eficacia muestra contra el Covid-19, también es la que mayores beneficios espera obtener en 2021, alrededor de unos 15.000 millones de dólares.
En este escenario, también hay sitio para compañías que han tenido hasta el momento un menor protagonismo.
“Son los actores más pequeños del 15% restante los que experimentaron un mayor crecimiento en 2020. Empresas como Novavax y Biontech, que se asociaron con los gigantes para ayudar a acelerar el desarrollo de vacunas, se beneficiaron tanto del aumento de reconocimiento como de la cuota de ingresos”, detalla Brinker.
La evolución de las distintas variantes del coronavirus también refleja que, aunque la pandemia concluyera, las vacunas continuarán siendo necesarias y, por tanto, los mayores réditos para las compañías.
“Las ganancias de las empresas con vacunas Covid-19 aprobadas podrían proporcionar un flujo de ingresos a largo plazo”, sostiene el analista.