El euríbor cerrará al alza tras marcar máximos en el mes
El euríbor cerrará por encima de abril tras haber tocado el máximo diario
El euríbor cerrará, previsiblemente, mayo en el -0,082%, por encima de la tasa con la que cerró abril después de marcar su nivel más alto diario en el -0,058%.
El euríbor, el índice al que se referencian la mayoría de las hipotecas, volverá a encarecer los créditos hipotecarios de quienes las revisen en mayo ya que cerrará en el -0,082%. Hace un año el euríbor marcó un -0,134%. En abril de este año, el indicador se situó en el -0,108%.
A pesar de que el Banco Central Europeo (BCE) inyectó liquidez al sistema con nuevas subastas, como la PELTRO, y mejoró las condiciones de la TLTRO, que tienen un coste del -1% después de haberlas abaratado en 50 puntos básicos, el euríbor se mantendrá entorno al -0,10% durante un periodo largo de tiempo.
Parece que la labor del BCE de contener la escalada del euríbor a través de las nuevas subastas de liquidez PELTRO están dando sus frutos.
Inyecciones de liquidez
Las PELTRO, conocidas así por sus siglas en inglés, fueron la nueva herramienta que el BCE se sacó de la manga en la pasada reunión del BCE celebrada a finales de abril.
Se trata de siete operaciones de refinanciación que comienzan en mayo de 2020 y que vencen, en una secuencia escalonada, entre julio y septiembre de 2021.
Se llevarán a un tipo fijo que es 25 puntos básicos inferior a los tipos oficiales de interés que se encuentran en el 0%.
Se trata de unas operaciones muy ventajosas para las entidades bancarias, puesto que obtienen un 0,25% de interés pidiendo prestado al BCE más lo que pueda obtener utilizando esa liquidez para el fin que crea conveniente.
Entre los objetivos prioritarios se encuentran que preste dinero a empresas y familias o compren deuda soberana para reducir los spreads.
Esto permitirá anclar al euribor en niveles del -0,10%.
El BCE y su relación con el euríbor
La evolución del euríbor, que en febrero cumplió cuatro años en negativo, está intímamente vinculado al desempeño del BCE.
El euríbor entró en negativo un mes antes de que el BCE colocara el precio del dinero en el 0%, en concreto fue en marzo de 2016 cuando el entonces presidente del BCE, Mario Draghi tomara esta decisión.
El índice se mueve al son que toca la música de la política monetaria y empezó a subir, en agosto de 2018 después de haber marcado mínimos en el -0,191% a medida que se acercaba el fin del quantitative easing, el programa de compra de deuda que se aprobó durante la crisis del euro.
En diciembre de 2018 serían las últimas compras del BCE y los mercados anticipaban que el organismo que rige la política monetaria del BCE subiría tipos en el primer semestre de 2019.
No obstante, la guerra comercial entre los Estados Unidos y China fue el primer hecho que desbarató estos planes.
Mínimos del euríbor en 2019
En mayo de 2019, el euríbor emprendió una senda bajista cuando Draghi señaló que el organismo debería tomar más medidas para evitar la incertidumbre que acechaba la zona euro y que hacía que el PIB se ralentizara.
Los mercados vieron en estas palabras una señal de que el BCE situaría los tipos en negativo y el euríbor emprendió una senda bajista que llevó a marcar mínimos diarios en agosto en el -0,399% y cerrar el mes en el 0,356%.
No obstante, estas medidas no se llegaron a tomar en septiembre. Draghi optó por hundir más la tasa de depósito hasta el -0,60% y optar por un sistema de escalada, conocido como tiering.
Llegada de Lagarde
La llegada de Christine Lagarde como presidenta del BCE en noviembre imprimió un nuevo carácter al BCE. La ex directora gerente del FMI señaló que se iba a realizar una nueva revisión estratégica del BCE, lo que dio por sentado, en los mercados, que el objetivo de inflación en el 2% se revisaría.
De nuevo el euríbor volvió a iniciar una escalada alcista, que se paró en seco cuando estalló la crisis del coronavirus.
La Reserva Federal de los Estados Unidos bajó los tipos de interés, algo que se interpretó por los mercados de que sería el camino a seguir por el resto de los bancos centrales.
Esto hizo que el euríbor marcara mínimos del año al cerrar en febrero en el -0,288%. Sin embargo, en la reunión del BCE el organismo sólo aprobó un paquete de compras 125.000 millones de euros, algo que decepcionó a los mercados.
Aunque finalmente aprobó un nuevo paquete de compras de 750.000 millones de euros y flexibilidad en la liquidez, lo que motivó que el euríbor se acerca a los mínimos del año y al nivel en el que previsiblemente acabará en 2020.