El 42% del ahorro de las familias está en depósitos
Los depósitos bancarios alcanzan los 899.800 millones de euros, máximos de 30 años
Asegurar los ahorros. Esta máxima ha llevado a las familias españolas a huir de las inversiones de riesgo y a apostar por los depósitos bancarios, que a finales de 2020 alcanzaron nuevos récords.
Según los últimos datos del Banco de España, el ahorro en depósitos de los hogares españoles entre enero y noviembre del año pasado creció un 6,87%, hasta alcanzar los 899.800 millones de euros, el máximo histórico desde que en 1989 se inició el registro.
Ya representan el 42% del ahorro financiero de los hogares y su incremento se ha debido a la elevada incertidumbre generada por la crisis económica, que ha agudizado la aversión al riesgo de las familias y se decantan por productos seguros en un momento en que el ahorro en España está en máximos.
Según datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), la tasa de ahorro de los hogares españoles llegó al 31,1% de su renta disponible en el segundo trimestre de 2020, lo que supuso un incremento de 13,7 puntos porcentuales respecto al mismo trimestre del año anterior.
Y gran parte de este ahorro lo dirigen a los depósitos aunque estén dando rentabilidades mínimas y, en muchos, casos negativas debido a la caída de los tipos de interés.
Intereses exiguos
La rentabilidad media de los depósitos ronda el 0,03% y los retornos máximos rozan el 1 por ciento. Por lo que, según los analistas, “tiene poco sentido” la querencia de las familias por ellos.
Su inclinación viene de lejos. Una de las causas que la motiva es el perfil conservador del ahorrador español, que, en general, prefiere sacrificar la rentabilidad antes de afrontar pérdidas, y más en momentos de incertidumbre como el actual en que conservar el capital es su mayor prioridad.
«Tanto familias como empresas prefieren dirigirse a activos defensivos, limitando el riesgo de sus carteras y optando por la cautela, de ahí su interés por los depósitos», señala Francisco Lomba, analista de inversiones de Afi Inversiones Globales SGIIC.
Además, en épocas de crisis los depósitos ganan protagonismo. Así ocurrió entre 2008 y 2012 en plena crisis financiera, cuando el 46 por ciento de los activos financieros de las familias españolas eran depósitos y efectivo, mientras que en los años previos a la crisis, entre 2005 o 2007, la cifra se reducía al 37 por ciento, y entre 2015 y 2019 se situó nuevamente por debajo del 40 por ciento. Hasta subir ahora al 42%, según el informe sobre ahorro Financiero de las Familias Españolas elaborado por Inverco.
Incultura financiera
Otra de las causas es la falta de cultura financiera de los españoles y «una enorme ausencia de asesoramiento, pedagogía y acompañamiento por parte de muchas de entidades y profesionales financieros», apunta Guillermo Domínguez Torres, delegado territorial de EFPA España.
Pero no somos los únicos. Según un informe del Banco Central Europeo, gran parte del ahorro acumulado por los hogares de la zona euro, que durante la crisis ha alcanzado «niveles sin precedentes», se ha dirigido a los depósitos, que aumentaron un 7,4 por ciento.
Así, los ahorradores de los cuatro países más ricos de la eurozona, Alemania, Francia, Italia y España, poseen 6.323 billones de euros en estos productos.
Previsiones al alza
Los analistas prevén que a corto plazo el ahorro de las familias en depósitos seguirá marcando máximos, al menos mientras dure la crisis y el miedo a una subida del desempleo sobrevuele el país.
Por ello, en opinión de Guillermo Domínguez, ahora es cuando los asesores financieros tienen que estar más cerca de los ahorradores y de las empresas porque ante tanta incertidumbre «deben enseñarles que su temor a invertir es lícito, pero también la valentía es necesaria para progresar».