Las hipotecas para jóvenes chocan con las recomendaciones del Banco de España
Las hipotecas para jóvenes financian el 95 por ciento del valor de tasación. La banca, por ello, exige otras garantías
La guerra hipotecaria vive su enésimo episodio. Ahora el campo de batalla se ha trasladado a la concesión de hipotecas para jóvenes.
Banco Santander, a través de Smartbank e Ibercaja esta misma semana comercializan sendas hipotecas para menores de 36 años que financian el 95 por ciento del valor de tasación (o en su defecto del valor de compra).
Lo curioso es que este porcentaje choca con las recomendaciones del Banco de España. El regulador nacional fue muy claro al respecto y puso una serie de límites.
Así, a raíz del estallido de la burbuja inmobiliaria y, con objetivo de limitar el riesgo, se recomendó que el importe máximo de financiación no superara el 80 por ciento del valor de tasación y que la cuota hipotecaria no fuera mayor que al 35 por ciento de los ingresos.
¿Cómo lo han solucionado el departamento de riesgos de cada entidad?
Estos préstamos hipotecarios tienen unas exigencias que no las puede cumplir cualquier menor de 36 años que quiera comprar una vivienda a través de un préstamo hipotecario.
En el caso de la entidad que preside Ana Botín, se exige una doble garantía. Por un lado, la vivienda y, por otro, se requiere un aval por cinco años de terceros, que se cancelaría automáticamente pasado ese plazo siempre y cuando no hubiera impagos o retrasos.
Por su parte, desde Ibercaja mantienen las mismas condiciones que para el resto de préstamos de hipotecas: unos ingresos mínimos de 2.500 euros mensuales.
De esta manera, la entidad se asegura que los futuros clientes tienen pulso financiero suficiente para poder hacer frente a las cuotas.
Los jóvenes siguen prefiriendo comprar
Las hipotecas para jóvenes siempre han formado parte de la oferta de las entidades financieras. Especialmente durante los años previos al estallido de la burbuja inmobiliaria, cuando las cajas de ahorro ofrecían diferenciales muy competitivos (las mejores ofertas eran del 0,25 por ciento sobre euríbor).
Y, es que, a pesar del alto precio de la vivienda, los jóvenes siguen prefiriendo adquirir una vivienda en propiedad.
Según un estudio publicado por Fotocasa, los menores de 35 años apuestan por la compra porque a la larga compensa los pagos del alquiler.
Asimismo, sigue muy arraigado la idea de que tener una vivienda en propiedad es una buena inversión.
Precisamente, el estudio refleja que a pesar del impacto de la pandemia, los jóvenes no han perdido el interés por comprar vivienda y que para ellos continúa siendo muy importante el hecho de convertirse en propietarios de un inmueble.
Otra de las apreciaciones más destacadas y positivas es que desciende por primera vez la idea de que se esté próximos a una burbuja inmobiliaria.
Por lo que, aunque ellos continúen percibiendo los precios como caros, reconocen que no son desorbitados.
La banca busca la rentabilidad de los clientes jóvenes
El interés de la banca por los clientes jóvenes no es nuevo. Hay ofertas personalizadas, por ejemplo, en cuentas. Y en este apartado no va a ser una excepción.
Por ejemplo, Kutxabank rebaja un 0,05 por ciento su interés a tipo fijo para menores de 35 años.
Este interés por los clientes más jóvenes se debe a que gracias a su perfil ofrecen una mayor rentabilidad que otros productos y esto se debe a que las hipotecas permiten ‘atar’ al cliente durante plazos muy largos (hasta 30 ó 35 años).
Además, algunas ofertas, igual que al resto de hipotecas, obligan una elevada vinculación con el requisito de contratar seguros, fondos de inversión o planes de pensiones, lo que permitirá más ingresos para la entidad vía comisiones.
En el caso de las entidades que no exijan estos requisitos sí que contemplan que, a larga, según vayan evolucionando las necesidades de sus clientes, vayan suscribiéndolos.
Asimismo, la banca no quiere perder la oportunidad que surge tras desatascarse el mercado inmobiliario, que genera una alta demanda que hasta la fecha estaba contenida.