Los precios de las hipotecas variables se acercan a los de la burbuja inmobiliaria
Los nuevos créditos a tipo variable ofrecen un diferencial de euríbor más el 0,79 por ciento
Mientras los futuros del euríbor ya anticipan que el valor se situará a finales de 2023 en el 1 por ciento, la banca ha comenzado a abaratar sus hipotecas a tipo variable anticipándose a este movimiento.
Esto hace que ya se puedan encontrar créditos hipotecarios a un tipo variable del 0,79 por ciento, apenas 19 puntos básicos por encima de la media de los créditos hipotecarios que se firmaban durante la burbuja inmobiliaria.
Y, aunque en esa época, se podrían encontrar hipotecas con diferenciales del 0,25 por ciento (las más baratas que se firmaron cuando el euríbor escaló por encima del 4 por ciento), el diferencial medio rondaba el 0,60 por ciento.
Bajan los diferenciales y sube el euríbor
Coincidiendo con un giro alcista del euríbor, algunas entidades como Bankinter dieron un giro a su estrategia en hipotecas. De esta manera, abarataron su préstamo hipotecario hasta situar el diferencial con el indicador en el 0,85 por ciento.
Pero no es el crédito más barato que se puede encontrar en este momento. Una de las hipotecas más competitivas que hay en el mercado es la que comercializa Evo Banco. La entidad cuenta con un préstamo con un diferencial sobre el euríbor del 0,79 por ciento.
Además, la vida del crédito es de hasta 30 años. Por otro lado, en un momento donde la vinculación con las entidades es una práctica habitual, la oferta de Evo Banco solo requiere dos productos, entre ellos, la domicilación de la nómina y la contratación de un seguro de hogar.
Y es que la vinculación puede resultar a la larga una pesada losa en los hipotecados vía comisiones y requisitos que deben cumplir si quieren seguir disfrutando de las condiciones favorables de las hipotecas.
Igual diferencial es el crédito de ING: la Hipoteca Naranja ING Prime. En este caso, el plazo de la hipoteca se puede alargar hasta los 40 años. Como condición para acceder al préstamo, es necesario domiciliar una nómina y contratar seguro de vida y de hogar. Eso sí no es un préstamo al que puedan acceder cualquier cliente, ya que está disponible para importes solicitados de más de 200.000 euros.
El motivo, explican fuentes financieras, es que la banca prefiere financiar propiedades prime, que son más difíciles que pierdan su valor.
Abundan las ofertas entre el 0,80 y el 0,89%
No obstante, el grueso de las ofertas todavía se concentra en el siguiente tramo. En diferenciales que van desde el 0,80 por ciento hasta el 0,89 por ciento.
En este caso, destaca la hipoteca de Coinc, el banco digital de Bankinter. En este caso ofrece un préstamo a tipo variable del 0,80 por ciento. En este caso, el préstamo no requiere ninguna vinculación, ni siquiera la de mantener domiciliada la nómina, mientas que el diferencial que comercializa su matriz, Bankinter, es del 0,85 por ciento y requiere cuatro productos vinculados. En la oferta, además, de domiciliar la nómina y seguros es necesario la contratación de un plan de pensiones.
Cierra el ranking los créditos de Kutxabank e ING. Ambas entidades cuentan entre su catálogo de productos sendos créditos a tipo variable con un diferencial del 0,89 por ciento y tres productos vinculados. La única diferencia es el plazo máximo que puede abarcar el crédito: 30 años en el caso del primero y 40 años para el segundo.
Rebajas de los diferenciales
“Vemos que hay un cambio de tendencia y que la banca vuelve a apostar por las hipotecas variables, con las que esperan ganar más dinero si el euríbor se mantiene al alza”, señala Miquel Riera, experto en hipotecas de HelpMyCash.
"Están rebajando los tipos variables y subiendo los tipos fijos, una estrategia encaminada a incentivar la contratación de hipotecas variables”, añade.
De momento, “es difícil que ofrezcan diferenciales mucho más bajos mientras el euríbor siga en valores negativos, pues les quedaría poco margen de beneficio”, explica Riera. En ese sentido, fuentes bancarias admiten que es posible que haya cierto margen de recorte solo cuando el euríbor vuelva a niveles positivos.