Renta 2018: ¿Qué consecuencias tiene presentar la Declaración fuera de plazo?

La campaña de la renta termina mañana si el resultado le ha salido a pagar,  mientras que si le salió a devolver la fecha límite fue la semana pasada. Sin embargo, habrá algún despistado que se haya perdido en los plazos y presente la declaración de la renta fuera de plazo.

En ese caso, se trataría de un error que aunque es subsanable conlleva una serie de sanciones.

¿Pero ¿qué pasa si presentamos la declaración fuera de plazo? Así, el fisco establece dos posibilidades 

Si el resultado de la declaración le sale a devolver.

En este caso, la Agencia Tributaria puede reclamar la presentación y, además, imponer multas.

No entregar al declaración a tiempo es una infracción leve que puede acarrear multas de hasta 200 euros. Si no hay requerimiento por parte de la Administración tendrá una reducción del 50%, pero, además, si no reclama el contribuyente, igual que ocurre con las multas, tendrá una reducción del 30%, lo que puede quedar en 70 euros.

Resultado a ingresar

En el caso de que debamos dinero al fisco. Si es el contribuyente quien de forma espontánea y voluntaria presenta su declaración deberá añadir al resultado de su declaración los siguientes porcentajes en función del tiempo transcurrido desde que finalizó el plazo de declaración

Antes de tres meses - 5% de la cantidad ingresada
Entre 3 y 6 meses - 10% de la cantidad ingresada
Entre 6 y 12 meses - 15% de la cantidad ingresada
Más de 12 meses - 20% de la cantidad ingresada más los intereses de demora, tal y como la AEAT hace cuando se retrasa en sus devoluciones.

Es posible reducir un 25% el recargo de los importes cuando se muestra conformidad con la sanción impuesta según lo dispuesto en el punto cinco del artículo 27

Peor lo tiene el contribuyente cuando es la Agencia Tributaria la de que descubre el "olvido", ya que puede establecer una sanción que va desde el 50% hasta el 150% de la cantidad a ingresar y se pagará el interés de demora. Esto también se aplica en los supuestos donde la cuota a pagar es inferior al importe que realmente corresponde.

Aún así, el contribuyente debe recordar que las declaraciones de IRPF expiran a los cuatro años de su presentación o del momento en que debían presentarse. Esto quiere decir que si no cumpliste con la renta 2015, Hacienda podrá reclamar el pago hasta el 30 de junio de 2019 y existen diferencias entre hacerlo antes o después por los intereses de demora que habrás de pagar.