Cómo es el inversor medio español
En el universo de la inversión, como en la propia vida, existen diferentes patrones de comportamiento que tienen su origen[…]
En el universo de la inversión, como en la propia vida, existen diferentes patrones de comportamiento que tienen su origen en el modo de ser de las personas, en su edad, su carácter, su manera de enfrentarse a la realidad, sus objetivos, sus miedos, sus sueños y sus ambiciones.
Como expertos asesores en planes de inversión a medida, uno de los principales factores que tenemos en cuenta en Micappital a la hora de diseñar la cartera de nuestros clientes es su tolerancia al riesgo, pues de ello -junto con otros aspectos como su capacidad financiera o su horizonte temporal- va a depender en gran medida el tipo de fondos en los que decida depositar su dinero.
En el caso del inversor español, podríamos afirmar que muestra un perfil mayoritariamente conservador, con baja tolerancia al riesgo, y esa es la razón por la cual un 40% de los ahorradores no se deciden siquiera a dar el paso a convertirse en inversores, limitándose a almacenar su capital en cuentas corrientes y depósitos que apenas les generan rentabilidad.
La edad es un determinante claro de los comportamientos de inversión. Por regla general, los jóvenes entre 25 y 35 años no suelen querer asumir grandes riesgos, por miedo a una posible coyuntura económica adversa que pueda dejarles sin capital, pero al mismo tiempo aspiran a vivir mejor en el futuro, para lo que necesitan rentabilidad. El problema es que con la actual situación de los tipos de interés resulta imposible conseguir altas rentabilidades si no optamos por un nivel de riesgo elevado.
Los mayores de 35 años tienen mayor conocimiento financiero y se muestran un poco menos conservadores que los millennials, están mejor orientados a su perfil de riesgo, aunque sigue habiendo un elevado porcentaje que no toma parte activa en el escenario de la inversión.
Finalmente, en los últimos tiempos venimos detectando que las personas con edades cercanas a la jubilación son partidarias de asumir un alto riesgo para tratar de maximizar su patrimonio antes de que llegue ese momento, pero se trata de una decisión financiera errónea, pues el corto plazo de que disponen no les permite llevar a cabo una apuesta arriesgada con resultados óptimos.
Fondos "made in Spain"
Ese carácter conservador del inversor español se refleja también en el hecho de que, en su mayoría, los fondos que eligen para depositar su patrimonio son fondos que sólo invierten en nuestro país, principalmente en compañías del Ibex 35, lo que representa una pérdida de oportunidad desde el punto de vista de la rentabilidad, y además nos deja mucho más expuestos ante una eventual crisis económica.
Tendemos a pensar que un pequeño inversor no puede invertir en fondos internacionales, que eso se queda para los grandes capitales. Sin embargo, no sólo es posible, sino recomendable.
De hecho, desde Micappital recomendamos optar por fondos de inversión españoles que inviertan fuera de España o bien acudir directamente a fondos de inversión internacionales, aunque muchos bancos no ofrecen esa posibilidad a sus clientes. Por ello, la mejor alternativa para tener nuestro dinero repartido por el mundo, minimizando los riesgos y aumentando nuestra rentabilidad, es recurrir a un equipo de inversión profesional que gestione nuestro patrimonio junto con el del resto de partícipes de un fondo de inversión.
Si tenemos ayuda a la hora de invertir y confianza en nuestro asesor seremos capaces de ajustarnos mejor a nuestro nivel de riesgo y obtendremos mejores resultados financieros.