Diversificar para la jubilación, con planes de pensiones
La planificación financiera para la jubilación está adquiriendo una importancia mayor, considerando las dudas generadas por la viabilidad de una[…]
La planificación financiera para la jubilación está adquiriendo una importancia mayor, considerando las dudas generadas por la viabilidad de una pensión pública digna. Una distribución demográfica desigual, en la que los pensionistas ocupan un porcentaje crecientemente mayor respecto a los cotizantes a la Seguridad Social, está alertando del importante cambio que estamos viviendo y de la necesidad de adaptar nuestra economía y nuestra sociedad a esta nueva situación.
Como, por ahora, los diferentes gobiernos sólo han aplicado parches temporales, sin definir una estrategia de financiación clara, los futuros pensionistas se encuentran con la necesidad de planificar su jubilación con una información más bien escasa. Sin duda, el conocer la cantidad que se percibiría resultaría de gran ayuda, pero por ahora no contamos con esa información y hemos de tratar de trazar un plan en base a estimaciones.
Como sucede con cualquier otro tipo de inversión, para definir un plan de ahorro/inversión para la jubilación, es importante marcarse un objetivo a alcanzar y definir un horizonte temporal que, en este caso, podría ser la fecha de jubilación. Hay que tener también en cuenta la capacidad de ahorro disponible en cada caso y la fiscalidad más conveniente. Y, también como en cualquier otro tipo de inversión, la diversificación puede ser de gran ayuda, distribuyendo el capital invertido entre diferentes tipos de activos, con diferentes niveles de riesgo, lo que permitiría una mayor rentabilidad con un riesgo menor.
Así, si se desea comenzar un plan de pensiones al inicio de la vida laboral, pero el perfil de riesgo del inversor es moderado, se podría invertir en un plan de pensiones del sistema individual de renta variable hasta un 50 por ciento de su capital, un 40 por ciento a uno de renta fija y el resto asignarlo a un plan de rentabilidad absoluta. Veamos qué cartera podríamos formar.
En renta variable, para una mayor diversificación, seleccionamos BESTINVER GLOBAL de la categoría VDOS de Renta Variable Internacional Global, dentro del grupo de planes con calificación cinco estrellas de VDOS. Obtiene en el año una rentabilidad de 3,90 por ciento y de 4,69 por ciento en el último año, con un coste por volatilidad en este último periodo de 7,56 por ciento, bastante reducida para tratarse de un plan que invierte globalmente en renta variable. En los últimos cinco años acumula una revalorización de 68,54 por ciento. Al menos un 90 por ciento de su exposición en renta variable corresponde a mercados de la zona euro y demás países de la OCDE, pudiendo invertir en países emergentes hasta un máximo del 10 por ciento. Siguiendo la filosofía value de la gestora, invierte en compañías con perspectivas de revalorización a medio y largo plazo, sin especial predilección por algún sector o país. Gestiona un patrimonio de 671 millones de euros, correspondiendo las mayores posiciones en su cartera a Informa Plc (5,22%) Standard Chartered Plc (3,65%) Just Eat (1,92%) BNP Paribas (1,88%) y el fabricante finlandés de grúas Konecranes OYJ (1,84% La suscripción del plan requiere una aportación mínima de 100 euros y una aportación periódica de 50 euros, aplicando una comisión fija de 1,50 por ciento y de depósito de 0,04 por ciento.
En renta fija, uno de los mejores resultados en el año los obtiene el plan MEDIOLANUM RENTA FIJA de Mediolanum Pensiones, con un 0,29 por ciento de rentabilidad desde el pasado 1 de enero. A un año, se revaloriza un 2,03 por ciento, con un dato de volatilidad de 1,33 por ciento. En los últimos cinco años, la rentabilidad del plan es de 20,31 por ciento. Sumando un patrimonio bajo gestión de 71 millones de euros, invierte mayoritariamente en deuda pública y bonos corporativos europeos con un nivel de riesgo de insolvencia muy reducido. Se recomienda un periodo de inversión en este plan de cinco años. Entre las mayores posiciones en su cartera encontramos emisiones de CP COMBOIOS DE PORTUGAL (5,19%) CRITERIA CAIXA SA (3,78%) NHHSM 3.75 10/23 (3,76%) CEIFP 4.875 09/24 (2,96%) y AEGON NV (2,78%). No es necesaria una inversión mínima para suscribir este plan, aunque si una inversión periódica mínima de 10 euros. Tiene un coste de comisión fija de 0,85 por ciento y de 0,20 por ciento de comisión variable.
En rentabilidad absoluta, seleccionamos un plan con una volatilidad reducida y un volumen de patrimonio razonable, que cuenta con una historia de cinco años. RENTA 4 DEDALO obtiene una rentabilidad en el año de 0,57 por ciento y de 1,24 por ciento en el último periodo anual, en que registra un reducido dato de volatilidad de 0,93 por ciento que lo posiciona entre los mejores de su categoría, en el quintil cinco. A cinco años, se revaloriza un 11,94 por ciento. Con un patrimonio bajo gestión de 82 millones de euros, el plan tiene un objetivo de rentabilidad absoluta y no está referenciado a ningún índice. Para ello, se gestionan activamente las posiciones mediante técnicas de gestión alternativa, pudiendo invertir en distintas clases de activos, aunque la inversión mayoritaria se centrará en renta variable. Las mayores posiciones en su cartera incluyen depósitos de BCO.SABADELL 0.10% VTO.27/11/2018 (8,49%) y BMN 0,05% VTO.27/11/2018 (8,48%) el contrato de futuros sobre EURO/DOLAR JUNIO-2018 (7,45%) y las emisiones de ECP ACCIONA FILIALES 26/04/2019 (4,81%) y de GRIFOLS SA 3.2 05/01/25 (3,73%). La suscripción de Renta 4 Dédalo requiere una aportación mínima inicial y periódica de 30 euros, soportando sus partícipes una comisión fija de 1,10 por ciento y de depósito de 0,10 por ciento.
Puesto que el traspaso entre diferentes planes de pensiones no atrae retenciones fiscales, se puede alterar la cartera cuando se considere necesario sin coste impositivo. Con la diversificación en diferentes tipos de plan podemos conseguir un rendimiento medio, reduciendo tanto la volatilidad de la inversión como la posibilidad de incurrir en pérdidas.