Cataluña: Los riesgos económicos de la independencia merecían otro debate

En la multitudinaria melé provocada por el presidente de la Generalitat y candidato por Junts pel Sí, Artur Mas, en la que el bloque independentista y las voces contrarias a la sedición catalana llevan tiempo agarrados, nadie se ha preocupado todavía por buscar el balón y jugarlo. El objetivo prioritario, desde el primer momento, ha sido derribar al contrario utilizando todo tipo de malas artes: amenazas, medias verdades, e incluso con peticiones de «un gran corte de mangas» para Mariano Rajoy, Pedro Sánchez y Pablo Iglesias, como hizo recientemente el propio Artur Mas.

Es cierto que las campañas electorales no se caracterizan, precisamente, por un elevado nivel intelectual en sus debates. Pero en este caso y ante el intento de los independentistas de convertir estas elecciones en un plesbicito separatista, los ciudadanos se merecían explicaciones más serias sobre los riesgos económicos de la separación, y no asistir a discusiones más propias de tabernas, con el lenguaje soez y frívolo que eso conlleva. 

Hasta el «Financial Times» ha tenido que intervenir para pedir a los independentistas que fueran «honestos» con los catalanes a la hora de contarles el coste económico que supondría la ruptura con España. 

Se ha agradecido, en cambio, que los agentes sociales, por fin, se pronunciaran ante el desafío independentista. Tiempo de sobra han tenido para hacerlo, más de tres años, concretamente. Por eso, extraña que lo hicieran cuando el partido estaba a punto de entrar en tiempo de descuento. Sin embargo, hasta el domingo no sabremos si estos mensajes de última hora, con advertencias incluidas por parte del gobernador del Banco de España, Luis María Linde, sobre el peligro de un «corralito», han calado y servirán para dar la vuelta a las encuestas.

Por otra parte, y como es nuestra obligación, en el número de INVERSIÓN & Finanzas.com de esta semana analizamos con rigor y seriedad -que es lo que ha faltado en la campaña electoral de Cataluña- los distintos escenarios que se abren para el inversor dependiendo de los resultados que arrojen las urnas el domingo 27 de septiembre. Queremos que estén preparados para que sus inversiones no se vean afectadas por lo que pueda suceder. Sin trampas ni demagogia barata.