Defender al consumidor, un muy buen negocio

Es difícil entender que una asociación de consumidores pueda llegar a ser un buen negocio. La sociedad española y las[…]

Es difícil entender que una asociación de consumidores pueda llegar a ser un buen negocio. La sociedad española y las leyes que regula la actividad de este tipo de organizaciones cuya única finalidad es la protección de los consumidores, puedan convertirse en un negocio lustroso, muy lustroso.

Y es difícil convertirse en un negocio rentable por dos esenciales motivos, al menos. Uno, porque por ley son organizaciones sin ánimo de lucro. Y dos, porque tener como única fuente de ingresos las cuotas de los asociados y las subvenciones de los organismos oficiales no da para hacerse rico. El espíritu asociacionista de los españoles no ha dado nunca para mantener nada y las subvenciones del Estado, salvo en casos muy especiales (ERES en Andalucía) tampoco son para volverse loco, aunque en estos tiempos es difícil asegurar esto.

Pero siempre hay gente con capacidad para burlar la ley. Algunos datos: ¿qué asociación que defiende a los consumidores y usuarios ha conseguido unos beneficios de 1.264.347,60€?

La primera respuesta que se le viene a la cabeza a uno es: ninguna. Pues la hay.

Pero aún más, ¿es posible ingresar sólo por cuotas y subvenciones 18.077.360,43€? Tampoco. Tiene que saber el lector que estas cifras corresponde a la suma de los ejercicios de 2008,2009,2010 y 2011. Los datos están en el registro Mercantil de Madrid y pertenecen a la asociación que defiende a los clientes de los bancos; de nombre AUSBANC EMPRESAS.

Podrán pensar que uno exagera y que las cantidades divididas entre cuatros años... suponen más de 4,5 millones de euros de ingresos anuales y más de 300.000 euros de beneficios anuales.

Les invito a que echen un vistazo a las cuentas de otras asociaciones que tienen por objeto defender al consumidor. Les aseguro que están muy lejos de estas cantidades. Pero lo más importante que debe ser tenido en cuenta: estas asociaciones nacen jurídicamente "sin ánimo de lucro".

Alguien se lo salta. Un "genio": don Luis Pineda. ¿Cómo? Lo iremos contando, eso si, con datos y hechos. Hay para rato.

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