El BCE y su programa de compras
En el 2018 el BCE terminó con el programa de compra de activos, después de cuatro años llevando a cabo una política monetaria expansiva. La normalización monetaria está llegando para el BCE y debería de continuar durante el 2019, siendo este su principal gran reto al que se enfrenta el BCE.
En el 2018 el BCE terminó con el programa de compra de activos, después de cuatro años llevando a cabo una política monetaria expansiva. La normalización monetaria está llegando para el BCE y debería de continuar durante el 2019, siendo este su principal gran reto al que se enfrenta el BCE.
Por el momento el ente económico europeo continuará con las compras por valor de 200.000 millones de deuda durante este año. Todas estas circunstancias no eximen de una primera subida de tipos después del verano de este año, siempre y cuando, la evolución de la economía europea sea lo suficientemente sólida para que dicha subida progresiva de tipos de interés no tenga un impacto negativo dentro de la misma. Las reuniones clave para esta cuestión serán las que tengan lugar durante el segundo trimestre que tendrán lugar, el 10 de abril y el 6 de junio. Aunque la más importante de este año será la del 24 de octubre cuando Mario Draghi abandonará la presidencia del BCE.
Durante este 2019 deberemos estar atentos también a qué impacto tiene este tipo de decisiones en la economía española, que aunque mantendrá un crecimiento robusto durante este año, debemos conocer que el mismo ha venido condicionado también por las reformas estructurales que se han dado y han permitido la recuperación económica, al verse modificadas dichas condiciones. A esos posibles problemas estructurales debemos de sumarle el problema con el mercado laboral, el alto grado de endeudamiento público y privado, unido a los problemas políticos territoriales y los nuevos impuestos que están por venir, pudiendo llegar a lastrar el crecimiento de la economía.
Estas circunstancias, unida a la continua preocupación por el crecimiento global debida a la desaceleración económica sumándole, los ya conocidos factores de incertidumbre que tenemos actualmente en el mercado, son un cúmulo de circunstancias lo suficientemente importante para repercutir dentro de nuestro mercado, aunque parece que una vez ya conocidos los focos, lo peor ya ha pasado. Para nuestra economía y sobre todo para el BCE será clave ver si no llega tarde la normalización monetaria, ya que de darse unos malos datos macroeconómicos dentro de la economía estadounidense y llegara una posible recesión que llegara por ende a Europa, el BCE no tendría margen de maniobra con unos tipos de interés lo suficientemente bajos como para no servir de herramienta como ya hizo en el pasado.