El futuro será mejor
El futuro, sin duda, será mejor. Lo dice el Fondo Monetario Internacional, que espera que la economía norteamericana crezca a ritmos del 3.5/3.6 % en 2015-2016.
El futuro, sin duda, será mejor. Lo dice el Fondo Monetario Internacional, que espera que la economía norteamericana crezca a ritmos del 3.5/3.6 % en 2015-2016. Pero, siempre hay un pero, revisa a la baja el crecimiento esperado para 2014 ante el crecimiento "tibio" de la economía. ¿Y por qué el crecimiento tibio? Por la incertidumbre internacional (no dice si es la zona Euro o los emergentes, quizás sean ambos) y por el impacto fiscal mayor de lo esperado este año.
Y para el futuro? Les pide a las autoridades norteamericanas un camino a medio plazo de ajuste. Asumimos, ante las críticas del 1.5/2.0 puntos este año, que ese ajuste planeado a medio plazo debe ser mesurado. Pero también hay recomendaciones a la Fed: que haga lo que haga, piense en los problemas de mantener tipos de interés nulos y expansión monetaria durante un periodo demasiado largo. ¿Es un periodo demasiado largo? Me duele ya la cabeza.
¿Lo ven? esto es un buen ejemplo de incertidumbre. Y se centra en la principal economía mundial, desarrollada y esperado (deseado...si el USD no lo impide) motor de crecimiento para el resto. A medio plazo, claro. El futuro, siempre, será mejor. ¿Les suena? Llevamos años hablando del tema. Y con el Fondo Monetario Internacional que siempre espera que en el futuro la economía crezca por encima del 3.0 %. Pero, cuando nos acercamos al momento de la verdad, se vuelve a aplazar al siguiente ejercicio. Y volver a empezar. Y, mientras, la ciudad de Detroit se declara en suspensión de pagos.
La incertidumbre es nuestra compañera de viaje. Optimistas y pesimistas, finalmente echan mano de ella para matizar sus conclusiones. ¿Quieren otros ejemplos recientes? Aquí los tienen: El Banco Central Europeo está convencido del cumplimiento de los objetivos de déficit para este año a Italia, valorando de hecho que son una relajación, pero advierte de la posibilidad de incumplimientos (el propio Primer Ministro aludió el jueves al escaso margen de maniobra en los impuestos).
Mersch, del Banco Central Europeo, abre la puerta a tipos de interés negativos en depósito, pero advierte de consecuencias no deseadas, si finalmente se opta por aplicarlos. La Troika, el Fondo Monetario Internacional, dan el visto bueno al cumplimiento del plan portugués, pero la Institución Supranacional alude a que se mantiene un alto riesgo de que no se cumplan los objetivos core. S&P mantuvo el rating de la deuda pública española en el BBB, apelando a la disposición del Gobierno para seguir con las reformas, pero advierte sobre tres riesgos:
1. Políticos.
2. El deterioro fiscal.
3. La posibilidad de que se retome la crisis financiera en la zona Euro.
El "shock" en los mercados emergentes es otra fuente de incertidumbre. ¿Por qué la inestabilidad y el castigo? Hay dos respuestas, con la Fed protagonizando la primera y la propia dinámica de los mercados la segunda. En definitiva, muchos inversores estarían repatriando dinero desde estos mercados ante el anticipo de subidas de tipos en USA.
Pero, ¿realmente la Fed quiere que suban los tipos USA? En este punto dos interpretaciones:
1. La Fed no ha dicho nada.
2. La Fed, en todo caso, anuncia que en algún momento en el futuro, si se dan las condiciones macro (de mercados se supone) limitarán la compra de activos (pero seguirán comprando activos).
Si esto es así, ¿por qué tantos nervios? Aquí debemos incluir la segunda respuesta anterior: deterioro de los fundamentos de estas economías y/o sobrecompra de estos mercados en las carteras internacionales. Vaya, vuelve a dolerme la cabeza. Tomaré una aspirina mientras pienso que el futuro será mejor.