El Ibex apoyado por los bancos
El sector bancario es el que más peso tiene dentro de nuestro selectivo, por lo que no es de extrañar que el Ibex haya atacado la semana pasada los máximos vividos durante el 2016 y entrase en la zona de los mínimos de 2015
El sector bancario es el que más peso tiene dentro de nuestro selectivo, por lo que no es de extrañar que el Ibex haya atacado la semana pasada los máximos vividos durante el 2016 y entrase en la zona de los mínimos de 2015. Un comienzo prometedor de la presentación de resultados del Santander acompañó a todos sus homólogos durante el resto de semana, lo que ocasionó un aire de optimismo dentro del sector.
Si tenemos en cuenta que el negocio automovilístico y financiero venían siendo los más perjudicados durante los últimos años, esta situación parece revertirse en el primer mes del año por el claro incremento del consumo y dentro de los bancos por los puntos beneficiosos que se darán en el sector.
En lo que se refiere a política monetaria por parte del BCE, la misma ha perjudicado claramente a los bancos, aunque la proximidad de un cambio en la estrategia seguida por el ente económico durante este ejercicio, adelanta una transformación positiva y clara en los resultados de la banca. El mercado está descontando la mejora de la solvencia, una mejora de la economía del ciudadano corriente, un acceso mayor hacia la deuda y una rentabilidad superior dentro del negocio. Por no mencionar las mejoras claras internas en lo que a márgenes en términos de eficiencia, interés a clientes y comisiones se refiere.
Una de las condiciones más beneficiosas para el sector bancario es que el BCE busca invertir la curva de tipos, que en la actualidad está prácticamente plana, para que los vencimientos de deuda de mayor plazo tengan mayores tipos de interés, por lo que beneficia a los bancos que son uno de los principales tenedores de deuda pública, ya que tendrán deuda con mayores tipos de interés.
Otra cuestión claramente importante es que la QE mantenida por parte del BCE, que va a cambiar de ruta durante este mismo año los incrementos del tipo de interés, previsibles, beneficiarían el negocio de los préstamos al consumidor de a pie, consiguiendo un mayor rendimiento.
Otro plus para el sector es la estabilidad que se ha dado en los emergentes que en el pasado se convertían en un lastre. Todo parece adelantar que este 2017 será un buen año para el sector bancario.