El Reino Unido marca el camino a China

El futuro del Reino Unido como centro europeo de servicios financieros después de Brexit es interesante y digno de estudio, para una economía como la China, que busca desarrollar una unión económica transfronteriza de Hong Kong, Macao y ciudades de la provincia de Guangdong.

La inminente salida del Reino Unido de la Unión Europea, servirá de ejemplo para analizar qué tipo de acuerdos se han puesto en marcha para permitir que las regiones con políticas económicas y reguladoras diferentes, tengan un mercado financiero totalmente integrado.

El mes pasado se dio a conocer un plan para lograr ese objetivo, aunque no se dice mucho sobre cómo permitir los flujos comerciales y financieros a través de una región tan compleja. El planteamiento se enfrenta a grandes desafíos para abordar las enormes diferencias entre los tres sistemas aduaneros, las tres monedas y los tres tipos de sistemas financieros. Sin un comercio fluido de bienes, servicios, personas y capital, el plan no sería viable.
Una gran diferencia es que, el papel financiero del Reino Unido en Europa se construyó sobre la base de ser parte de la misma jurisdicción: la Unión Europea. Cómo sobrevive ese sector una vez que el Reino Unido abandona la UE es relevante para el planteamiento financiero que tiene China, en lo que sería una copia de su sistema. Donde Hong Kong seria el centro financiero dentro de la nueva estructura.

Europa es un ejemplo eficaz con respecto al flujo de personas y servicios, ya que el espacio Schengen racionaliza los intercambios entre las naciones no pertenecientes a la zona del euro y las de la zona del euro. El mecanismo de pasaporte de la UE que permite a las empresas de servicios financieros registradas en un país de la UE prestar servicios en cualquier otro país también es una buena referencia. Estas son las bases que intentará implementar China en ese triángulo financiero con un alto potencial tanto nacional como internacional.

Al hacer referencia a los métodos actuales de la Unión Europea para integrar a múltiples países a través del libre movimiento de personas, bienes y capitales, todavía es osado pensar que en un futuro cercano China suavice las duras fronteras que existen entre las tres jurisdicciones.

La moneda china también está protegida por controles de capital, pero se valora un tipo de cambio más orientado al mercado y libre comercio, que puede beneficiar el crecimiento regional a largo plazo, a pesar de crear presiones a corto plazo para la economía.

Se necesita cierto grado de autonomía en la innovación financiera en la región, como una cuota dentro de la cual el capital pueda fluir libremente a través de las fronteras, sugirió la investigación. Infraestructura que dista mucho de la situación actual dentro de los tres puntos geográficos comentados anteriormente.