India la gran apuesta
La apuesta por los emergentes sigue siendo una alternativa valorada positivamente.
La apuesta por los emergentes sigue siendo una alternativa valorada positivamente. Ya vimos un trasvase de flujos financieros importantes el año pasado, en el último trimestre, las acciones de los mercados emergentes fueron un foco de atención importante para los inversores a nivel mundial y principalmente para los europeos. Los bonos de estos países también están siendo un reclamo importante, al igual que los activos referenciados a este tipo de países.
El miedo hacia lo desconocido limita aun la posibilidad de entrada mayor en este tipo de mercado, a muchos inversores a los que el miedo a un freno de la globalización les cierra la puerta a oportunidades de inversión que en muchos de los casos tiene una rentabilidad mayor que los instrumentos al uso y no por ello va asociado a un mayor riesgo, ya que los fundamentales de los emergentes tienen una valoración en muchos de los casos mejor que la de los países desarrollados.
La realidad es que una diversificación e incluso una ponderación importante de la inversión dentro de estos países sería una alternativa muy interesante.
El crecimiento económico actualmente sólo se encuentra dentro de los países emergentes y por fundamentales es prácticamente la única alternativa, eliminando las claras oportunidades que ya hemos comentado en anteriores ocasiones.
Latinoamérica sigue siendo una buena alternativa que está teniendo un comportamiento extraordinario desde comienzos de año, pero pierde fuerza debido a los problemas importantes que sufre por la falta de instituciones sólidas y la tan extendida corrupción.
Dentro de los emergentes nos quedaríamos con la zona de Asia-Pacifico, pues pensamos que tiene mejores oportunidades. La entrada en escena de unos gobiernos cada vez más reformistas, un mayor crecimiento y unos precios, por debajo de las valoraciones contables, otorgan un posible rendimiento mayor. Otro factor diferenciador es un incremento sustancial de la clase media, factor que beneficia claramente a las compañías que se centralizan en el consumidor emergente.
Dentro de Asia, particularmente elegiríamos India, aunque no es el país más barato, si es el que está teniendo mejores reformas que otorgarían una mejor infraestructura para el crecimiento, entre las mismas, estaría el incremento de impuestos.
En India los cambios estructurales ya están impulsando el crecimiento y la liberalización laboral y medioambiental se presume clave en una proyección mayor. Los incentivos gubernamentales hacia la inversión nacional y extranjera son un factor clave en la entrada de inversores interesados en hacer crecer un país que parece no tener límite.