¿Todo está bien?
"Y miré, y vi aparecer un caballo amarillo. Su jinete se llamaba Muerte, y el Abismo de la muerte lo[…]
"Y miré, y vi aparecer un caballo amarillo. Su jinete se llamaba Muerte, y el Abismo de la muerte lo seguía".
Apocalipsis 6-8.
Para todos aquellos de ustedes que están tranquilos teniendo el oro a salvo en el banco y que piensan que los gobiernos no lo van a expropiar, creo que deberían comenzar a pensar en otro lugar para guardar su oro. Vean la carta dirigida a clientes a lo largo del pasado fin de semana, en la que el megabanco holandés ABN Amro está cambiando sus reglas en la custodia de los metales preciosos, y en la que ya no permiten la entrega física del oro. "No tenga miedo", agregan intentando tranquilizar, "su cuenta se liquidará al precio de oferta y demanda en el mercado y no necesita hacer nada puesto que tenemos su inversión en metales preciosos."
La carta es la siguiente:
Este es uno de los mayores bancos de Europa y esta carta sale al mismo tiempo que tenemos una crisis de confianza en Chipre. ¿Es una coincidencia? Yo creo que no! De forma lenta pero segura se quieren cortar todas las vías que le permite proteger su riqueza.