Acciona Energía descarta el modelo español para salir a bolsa
La filial renovable de Acciona opta por un proceso en dos fases, poco habitual en España pero muy común en otros mercados europeos
Acciona ha optado para la salida a bolsa de su filial de renovables por un modelo diferente al que tradicionalmente se utiliza en el mercado español, pero muy común en el resto de países europeos.
Se trata de un proceso en dos fases. El primero es la presentación ante la CNMV del documento de registro como paso previo a la OPV. El supervisor ya le ha dado el visto bueno.
El segundo es el registro del folleto completo que incluirá la información respecto a la emisión concreta de valores que se pretende realizar y que dará lugar al inicio de la colocación de la OPV como tal. Este paso está sin concluir.
Acciona ha decidido optar por este camino porque "le facilita realizar presentaciones a los inversores previas al momento de la colocación efectiva de las acciones", apuntan fuentes de la CNMV.
Según los expertos, la compañía presidida por José Manuel Entrecanales ha podido descartar el modelo español y optar por el europeo porque la CNMV ya cumple con las exigencias de la Comisión Europea recogidas en la reforma de Mifid II.
"La CNMV ya ha iniciado el proceso transitorio de aplicación de la nueva normativa europea para simplificar los trámites necesarios para cotizar en los mercados", apunta Fernando Zunzunegui, socio fundador de Zunzunegui Abogados y coordinador legal de EFPA.
Simplificación demandada desde hace años por los mercados y por los intermediarios financieros, y que, a juicio de Zunzunegui, tiene "mucho sentido", siempre que "no ponga en cuestión la seguridad del mercado y la protección de los inversores".
Reducir tiempo y costes
También Gloria Hernández-Aler, socia legal de Finreg360, valora «muy positivamente" esta iniciativa y las medidas que se están poniendo en marcha para dinamizar las salidas a bolsa mediante una relajación de sus requisitos, "que son muchos y muy costosos para las empresas».
La experta en regulación financiera cree que estas medidas benefician a los inversores minoristas, ya que «lejos de quedar desprotegidos se amplía su universo inversor y también es positivo para las empresas que verán reducidos los requisitos que les supone salir a cotizar».
Un folleto más sencillo
Entre las ventajas de este modelo destaca el simplificar el folleto de emisión. Considera que no debe incluir un «catálogo de horrores de lo que hipotéticamente puede ir mal en un negocio a futuro».
A su juicio, debe explicar claramente los riesgos relevantes de la empresa emisora, de cada sector en concreto y de cada momento.
Clarificar el folleto también es esencial para Hernández-Aler, ya que «los folletos solo se los leen en su totalidad los analistas, no los inversores, y buena parte de esa información podría resumirse».
De hecho, una de las propuestas de la Autoridad Europea de Valores y Mercados para facilitar la financiación de las sociedades en el entorno pospandemia es flexibilizar la información del folleto.
La OPV de Acciona es la mayor de los últimos seis años y espera colocar en el mercado más del 25 por ciento de su filial. El objetivo de su presidente, José Manuel Entrecanales, es que Acciona Energía empiece a cotizar en la última semana de junio.