Banco Santander: el repliegue de la inflación frustra el rebote
Banco Santander se deja un 8% de su valor desde la presentación de los mejores resultados de su historia, hace dos semanas
La operación desatada hace algunas semanas para intentar revalorizar la acción de Santander parece, a estas alturas, muerta y enterrada.
El buen dato de inflación estadounidense, publicado este jueves, ha sido la puntilla a dos semanas de caídas, que han dado al traste con el intento de rebote de la entidad.
En concreto, Santander se dejaba más del 2 por ciento de su valor tras conocerse el IPC estadounidense, este jueves, pues el mercado anticipa que una moderación de la inflación podría provocar un giro en la política de los bancos centrales (el factor que ha alimentado el rally del sector bancario en los últimos meses). Este viernes volvía a perder fuelle al caer un 1 por ciento.
"Desde el punto de vista fundamental, hemos visto cómo el dato de IPC de los Estados Unidos ha generado presión vendedora sobre el sector financiero, que podría ver una relajación por parte de los bancos centrales a las alzas en los tipos de interés y, en este sentido, el Banco Santander se enfrenta a mantener los 2,5 euros por acción en las próximas semanas hasta la siguiente decisión de política monetaria tanto de la Fed, como del BCE", explicaba en ese sentido Darío García, de XTB.
De esa manera, Santander sigue siendo el peor banco del IBEX 35, al dejarse un 14 por ciento en el año (muy por encima del 8 por ciento que cede BBVA; del 22 por ciento que sube Bankinter; del 30 por ciento que se revaloriza Caixabank o del 33 por ciento que se dispara Sabadell).
Los "mejores resultados" de la historia de Santander, un jarro de agua fría
Pero más allá del dato de IPC, este regreso a los infiernos se produce después de que la entidad presidida por Ana Botín publicase los mejores resultados de la historia.
Específicamente, Santander registró unos beneficios de 7.316 millones de euros hasta septiembre, lo que supone nada menos que un 25,1 por ciento más que el año anterior.
“Los resultados han superado ampliamente nuestras estimaciones y las de consenso en las principales líneas de la cuenta de resultados, con crecimientos de doble dígito en comparativa interanual. El beneficio neto también supera nuestras estimaciones y las de consenso en todas las áreas geográficas”, escribía Nuria Álvarez, analista de Renta 4.
Si bien, el mercado parece empeñado en fijarse más en los puntos negros que en las fortalezas de la entidad. En ver el vaso medio vacío.
Así, si la acción superaba los 2,7 euros justo antes de la presentación de los resultados, el 25 de octubre, a estas alturas toca los 2,53 euros, lo que supone una caída del 8 por ciento desde ese día.
Santander: cuando mejorar no es suficiente
Un informe de Deutsche Bank titulado “Cuando mejorar no es suficiente” trata de explicar esta negativa percepción del mercado respecto a la acción de Santander.
“Tras un sólido desempeño en el trimestre, la lectura del mercado respecto a los resultados de Santander nos recuerda claramente que la complejidad no gusta y que problemas relativamente pequeños pueden oscurecer por completo una mejora general, sólida y gradual”.
En concreto, a los inversores parece preocuparles la marcha del negocio en Brasil. “Este trimestre, las preocupaciones clave están relacionadas con la persistente debilidad del margen neto de intereses en Brasil”, relata el documento de Deutsche Bank.
El 70% de los analistas recomienda comprar acciones del Santander
Si bien, prácticamente el 70 por ciento del consenso de analistas cree que es momento de comprar acciones de la compañía pese a estos problemas, pues los títulos tienen un potencial del 54 por ciento tras la corrección.
Los propios analistas de Deutsche Bank así lo piensan: “Pese a las preocupaciones relacionadas con Brasil y la reacción negativa del mercado, pensamos que los números del tercer trimestre confirman una tendencia positiva a nivel general, que apoya nuestra visión relativamente optimista sobre la capacidad de Santander para superar a la mayoría de sus competidores gracias a su diversificación geográfica y a su foco en la eficiencia”.
Así las cosas, en Deutsche Bank le dan un precio objetivo de 4 euros y recomendación de compra.
Algo menos optimistas son los expertos de JP Morgan, que también realizaron una valoración posterior a los resultados. En su caso, tienen al Santander en recomendación de neutral y un precio objetivo de 3,5 euros.
En concreto, los analistas de JP Morgan valoran positivamente la diversificación geográfica de la entidad, unas previsiones mejores de lo anticipado en España y su capacidad para aflorar retornos por encima de la competencia, pero les preocupa el deterioro de la calidad de los activos en Brasil y el riesgo regulatorio, entre otras cosas.
También Sergio Ávila, de IG Markets, es cauto con la cotizada: "Es un valor que a nivel fundamental cotiza por debajo de su valor teórico intrínseco (lo calculo en el entorno de los 3,50 euros) pero, sin embargo, tanto el año pasado como este año 2022, sus ingresos caen. En 2021 cayeron un 14,8 por ciento y este año se espera que caigan un 18,7 por ciento, lo que supone una caída del beneficio por acción normalizado del 42,5 por ciento".
En cambio, mejores perspectivas tiene Santander a nivel técnico, según Ávila: "Tiene activado un objetivo alcista por doble suelo en los 2,97 euros por lo que, mientras que no pierda el soporte de los 2,28 euros (que desactivaría dicho objetivo), lo más probable es que termine llegando a los 2,97 euros".