BBVA antepone el botín al riesgo en su apuesta turca
El mercado no comulgó con la opa de BBVA sobre Garanti, pero la aventura turca del banco tiene potencial de crecimiento si puede navegar las turbulencias a corto plazo
La opa a la totalidad sobre Garanti de BBVA anunciada el lunes se saldó con una caída del 4,28 por ciento en las acciones de la entidad bancaria, motivada por un mercado que penalizó el riesgo aparente de operar en un país donde la inestabilidad es recurrente.
Los analistas, no obstante, han mantenido una previsión optimista respecto al potencial de crecimiento BBVA, que puede obtener un gran botín si logra superar los desafíos que presenta Turquía.
Más rentabilidad y crecimiento, con mayor riesgo para BBVA
"Se había especulado en el pasado sobre que (esta operación) podía llevarse a cabo, pero el momento elegido realmente ha sorprendido porque estamos en un momento de ciertas turbulencias en Turquía por la situación de la pandemia, por el contexto político, la depreciación de la lira", afirma el director de análisis de renta variable, en Singular Bank, Nicolás López.
López señala que este compendio de razones puede explicar la mala acogida de la noticia por parte del mercado bursátil, pero apunta a algunos indicadores que dan a entender la decisión de BBVA, que parece haber escogido beneficios sobre riesgo en su búsqueda del control total de Garanti.
La valoración del conjunto del banco turco en 4.450 millones de euros al ofrecer un precio de 12,20 liras (1,06 euros) por acción supone que “la franquicia” de Garanti aporte el 10 por ciento del valor de mercado de BBVA, indica López, “y lo que aporta en beneficios es bastante más”.
“Turquía es un país con un crecimiento potencial del PIB del 3,5 por anual, frente al 1,5 por ciento de promedio en la Unión Europea. También es un país joven con una mediana de 32 años frente a 43 de la UE, es decir que no tiene los problemas demográficos que tenemos en Europa”, argumenta el analista de Singular Bank.
El nivel de endeudamiento actual de los hogares en Turquía, que se mueve en torno al 17 por ciento, en contraposición con el 70 por ciento europeo, es otro de los motivos que López alude como una oportunidad para BBVA por las posibilidades de crecimiento del crédito.
“En España, por ejemplo, llevamos bastantes años en que las familias y las empresas se están desapalancando. Después de la gran burbuja los niveles de deuda de las familias y empresas se están reduciendo y en consecuencia la demanda de crédito para los bancos es relativamente débil”, razona.
Los márgenes de la banca en un país como Turquía, por tanto, son más altos, con márgenes netos sobre activos que pueden llegar al 5 por ciento, o un ROE del 19 por ciento, que en España se mueve en torno al 10 por ciento.
Sumergirse de lleno en un mercado conocido
López concede que uno de los mayores riesgos de la operación es que aumenta la exposición de BBVA a mercados emergentes “de un banco que ya la tenía alta”.
El analista de KWB Daragh Quinn, no obstante, ya destacó que el control del 59,85 por ciento que BBVA ya gestiona implica que el banco“ya estaba asumiendo todo el riesgo implícito de Garanti y no hay mucha diferencia en pasar a controlar la totalidad”.
Georgi Bunchev, de Bloomberg Intelligence, asegura que el movimiento “tiene sentido para ellos” y sostiene que el movimiento refleja la confianza de la cúpula directiva en las perspectivas a largo plazo de Turquía, a escasos días de que el banco presente su nuevo plan estratégico.
De acuerdo a los datos ofrecidos por Bloomberg Intelligence, el peso de los mercados emergentes para BBVA fue del 66 por ciento durante los seis primeros meses de 2021, de los que México representó el 43%.
México perderá peso
La apuesta por Turquía, por tanto, continúa una línea de confianza en mercados emergentes que a la vez reducirá la cuota de México en el total de la entidad española.
Estos mismos datos, no obstante, también muestran que Turquía tuvo la mayor ratio de préstamos dudosos (que no se han devuelto o arroja señales de que no se devolverán) con un 7,3 por ciento, mientras que en España quedó en un 4,2 por ciento y en México en un 3,1 por ciento.
Los mercados emergentes también están expuestos a importantes cambios en sus divisas, y la lira turca ha perdido casi un cuarto de su valor este año.
Jeroen Julius, también de Bloomberg Intelligence, explica que las operaciones mexicanas y turcas de BBVA permiten que tenga mayor crecimiento de su crédito, mejores márgenes y una eficiencia de costo superios, pese a que la volatilidad de sus ingresos es mayor por estos cambios de divisa.
Pese a factores de riesgo como este, Sofi Peterzens desde JP Morgan ha reiterado su sobreponderación en BBVA, y continúa viendo margen positivo del 20 por ciento en el precio de la acción del banco.