El beneficio de Iberdrola se resiente por el gas y los impuestos en el Reino Unido
Iberdrola gana el 10,2 por ciento menos hasta septiembre a causa del incremento de los precios de la energía, la presión fiscal en el Reino Unido y menores plusvalías
Iberdrola cerró los nueve primeros meses del año con una caída del beneficio neto reportado de 2.408 millones de euros, el 10,2 por ciento menos que en el mismo periodo del curso anterior.
El retroceso se produjo, explica la compañía en los resultados remitidos a la CNMV, por un impacto negativo de 485 millones de euros debido a la subida de impuestos en el Reino Unido y el incremento del precio del gas, que lastró las cuentas en 85 millones de euros.
El Covid-19 sigue impactando en las cuentas con 123 millones de euros a causa de la morosidad, pero las provisiones asociadas a la pandemia se redujeron un 35 por ciento respecto a los nueve primeros meses de 2020.
Por el lado de plusvalías, Iberdrola contabilizó 92 millones de euros por la sentencia judicial favorable sobre la revisión de tributos al sector en España de 2013 a 2016.
Impactos por la facturas a minoristas
Sin tener en cuenta estas partidas, el beneficio neto ajustado habría aumentado un 5,2 por ciento, hasta los 2.688 millones de euros. Las ganancias se redujeron también al no contar la eléctrica con las plusvalías de la venta de la participación en Siemens Gamesa, que reportó hace un año 485 millones.
Las cuentas también estuvieron impactadas de forma negativa en 114 millones de euros en el ebitda por el real decreto-ley 17/2021 de España del 14 de septiembre, con el que el Gobierno buscó mitigar el impacto en la escalada de los precios del gas en la factura de los consumidores particulares.
Así, el ebitda consolidado creció el 10,7 por ciento, hasta los 8.165 millones de euros. También impactó el coronavirus con 128 millones y por el lado positivo ayudaron los 417 millones totales computados por la sentencia sobre los tributos al sector.
El ebitda ajustado creció el 5,2 por ciento y el efecto divisa resto 260 millones de euros, por la caída del dólar y el real brasileño. Excluyendo estos efectos habría aumentado el 8,7 por ciento.
Supera las previsiones
Las inversiones continúan marcando récord y crecieron un 6 por ciento durante los nueve primeros meses del año hasta superar los 7.000 millones de euros. El capital se empleó en un 90 por ciento en los negocios de renovables y redes.
Con todo, Iberdrola superó las previsiones del consenso del mercado que apuntaban a un beneficio neto reportado de 2.347 millones de euros y un beneficio neto ajustado de 2.711 millones y también batió al ebitda estimado de 8.000 millones.
La compañía señaló que el beneficio neto ajustado pudo mejorarse, ante la falta de plusvalías, gracias a los mejores precios a los que pudo colocar la energía renovable generada, aunque matizó que quedó dañado por el negocio de generación y clientes, sobre todo en España.
Además, Iberdrola destacó que no se ha beneficiado del incremento en el precio de la electricidad y la energía, tal y como muestra el impacto negativo del precio del gas. Esto fue así por el hecho de que fija los precios con los clientes por adelantado. Hasta siete millones de clientes de la eléctrica tienen contratos con precio fijado.
Guías reiteradas
Con estos resultados, Iberdrola reitera las guías de conseguir un beneficio neto de entre 3.700-3.800 millones de euros al cierre de ejercicio, por lo que en el último trimestre las ganancias tendrían que superar los 1.000 millones de euros.
También mantuvo la política de incremento de retribución al accionistas y por ello la compañía presidida por Ignacio Sánchez Galán puso en marcha la segunda parte de su programa "Iberdrola Retribución Flexible”, donde los inversores que elijan cobrar el dividendo en efectivo percibirán, al menos, 0,168 euros brutos por acción.