El IBEX 35 sube un 0,17% y salva los 11.900 puntos gracias al empuje de los bancos

El IBEX 35 cerró la sesión con un rebote del 0,17 por ciento y sostuvo por escaso margen los 11.900 puntos, lastrado por los grandes valores y por la apatía del resto de mercados europeos, donde el Cac y el Dax sumaron el 0,3 por ciento.

En la semana, el indicador de referencia en la bolsa española se anotó un rebote del 1,6 por ciento, pero terminó lejos de los 12.000 puntos que tuvo prácticamente conquistados el miércoles, antes de que el BCE rebajara el suflé de los parqués europeos.

Con mucha mano izquierda, la presidenta del BCE, Christine Lagarde, fue capaz de justificar la necesidad de bajar los tipos ante la debilidad económica de la zona euro, en particular de Francia y Alemania, pero al mismo tiempo no comprometió recortes más profundos en los próximos meses.

La banquera francesa manejó bien la comunicación el emisor europeo. No solo evitó el pánico vendedor. De hecho, hubo un suave impulso en los mercados, aun cuando hay serias dudas de lo que pueda hacer el BCE en el futuro con los tipos, dado el desigual crecimiento económico que muestra la zona euro.

Los resultados en Europa invitan a la cautela

Cuando Lagarde lanzó este aviso al mercado, el problema es que ya llovía sobre mojado. De hecho, sobre dos de los gigantes europeos, LVMH y ASML, caían chuzos de punta por sus malos resultados, que se tradujeron en pérdidas conjuntas de 25.000 millones de euros en capitalización en apenas dos sesiones.

El problema es que falta demanda y las economías del Viejo Continente se resienten, mientras los economistas miran con preocupación hacia China, que ha desplegado una gigantesca batería de medidas monetarias y fiscales para impulsar la actividad.

Pero los efectos ya se están dejando sentir en las cuentas de resultados. Este viernes, el susto en Europa fue para el fabricante de gafas EssilorLuxotica, que presentó unos resultados bastante por debajo de lo esperado precisamente por la debilidad de la demanda china.

Aunque las cifras no invitan al optimismo, hubo quien insistió en ver el vaso medio lleno. Así, los analistas de Barclays señalaron que el inicio de la temporada de resultados no ha sido lo suficientemente malo como para frustrar el rally del mercado.

Según estos expertos, las valoraciones más bajas de las acciones europeas, en comparación con las cotizadas estadounidenses, siguen siendo un atractivo para los inversores que buscan oportunidades en mercados relativamente más baratos.

Wall Street ya mira hacia las urnas

En la Bolsa de Nueva York, los resultados acompañaron más que en Europa y lo mismo sucedió con los datos macro conocidos esta semana. Sin embargo, el Dow Jones corregía un 0,2 por ciento al cierre de las bolsas europeas.

A partir de ahora, el foco estará en las elecciones presidenciales que se celebran a principios de noviembre.

Más allá de que gane Donald Trump o Kamala Harris, al mercado lo que le causa verdadero terror es que no haya equilibrio, que un solo partido pueda pasar el rodillo tanto en el Congreso como en el Senado, según explicó Josep Codina, director de análisis de la revista Inversión en ‘Pautas’, el podcast de mercados de finanzas.com.

Los bancos sostienen al IBEX 35

Dentro del IBEX 35, fueron los bancos los que sostuvieron al selectivo por encima de los 11.900 puntos. Así, BBVA se anotaba alzas del 2 por ciento, similar porcentaje de subida que lucían Caixabank y Banco Sabadell, mientras que Bankinter y Banco Santander ganaron el 1 por ciento.

Al frente del selectivo terminó Acciona Energía, que sumó el 2,7 por ciento, mientras que Amadeus progresó el 0,7 por ciento y Grifols se anotó el 0,6 por ciento.

Por la parte baja del IBEX 35, Inditex perdió el 1,6 por ciento, y Telefónica el 1,3 por ciento, en tanto que Iberdrola retrocedió el 0,5 por ciento. Imposible para el selectivo remontar el vuelo con tres de sus blue chips liderando el furgón de cola.

El petróleo retoma las caídas

En los otros mercados, el petróleo Brent retomó las caídas y retrocedía más de un 2 por ciento al cierre de las plazas europeas, hasta los 72,71 dólares por barril.

En el Forex, el euro recuperaba algo de terreno frente el dólar, con lo que la paridad euro/dólar escalaba un 0,2 por ciento, hasta las 1,0856 unidades.

Donde sí había más optimismo era en los mercados de criptomonedas, lo que dejó al bitcoin con un rebote superior al 2 por ciento, hasta los 68.486 dólares, según mostraban las pantallas de finanzas.com.

En renta fija, los precios de la deuda se movían al alza, con lo que la rentabilidad del bono alemán a diez años retrocedía 2 puntos básicos, hasta el 2,184 por ciento. Además, el bono español al mismo plazo bajaba cuatro puntos, hasta el 2,87 por ciento.

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