El mismo IBEX 35 para una guerra diferente
Tres semanas después del inicio de la invasión de Ucrania, el IBEX 35 repite el mismo comportamiento de otros conflictos bélicos. Fuerte impacto en los primeros días y rápida recuperación
Los analistas comentaban el 24 de febrero, cuando Putin dio luz verde a la invasión de Ucrania, que esta guerra sería diferente a las anteriores. Porque se desconocían (y se desconocen) sus planes y porque contaba con el comodín de las cabezas nucleares, un argumento de peso para impedir la participación directa de la OTAN en el conflicto.
Pero a pesar de ser una guerra distinta, las bolsas han mantenido su comportamiento de siempre. En enfrentamientos bélicos anteriores el patrón ha sido el mismo. En las primeras 12-15 sesiones se producen correcciones, que suelen ser de un 7 por ciento de media.
A partir de ahí empieza la recuperación hasta los niveles previos al inicio del conflicto y, tras un periodo de consolidación, continúan los avances.
El IBEX roza los niveles del 23 de febrero
Pues bien, tres semanas después del comienzo de la invasión, el IBEX 35 ya ha rozado los niveles en los que cotizaba el 23 de febrero. El indicador cerró ese día en los 8.440 puntos. Ayer jueves, tras cinco sesiones consecutivas de subidas, el IBEX 35 acariciaba ese nivel, ya que cerró en los en 8.412 puntos.
Aunque de manera testimonial, ha regresado a la zona en la que se movía hace tres semanas y eso es un motivo de confianza para los inversores.
Sorprende, en cualquier caso, el optimismo que transmiten las bolsas. Inicialmente, saludaron con avances la subida de tipos de la Fed y su posterior anuncio de endurecimiento de la política monetaria, con alzas en todas las reuniones hasta que los tipos cierren el año entre el 1,75 y el 2 por ciento.
Confianza de los inversores
También han mostrado una gran confianza en que salga un acuerdo de la mesa de negociaciones de rusos y ucranianos y han respaldado las promesas de las autoridades de Pekín de apoyar su economía. Los inversores estaban muy recelosos con el mercado chino después de que saliera a relucir sus posibles implicaciones con Rusia y por el aumento de casos de Covid que frenan su actividad económica.
Pero las garantías dadas por el responsable de política financiera china sobre la regulación y la flexibilidad en la política monetaria han despejado, de momento, las dudas del mercado.
Lo cierto es que, a pesar de este optimismo, mientras el conflicto de Ucrania siga abierto, las bolsas no están libres de nuevas sacudidas. El camino de la recuperación está en marcha, pero no es un camino sin curvas. Por eso, un exceso de confianza puede ser muy peligroso. La cautela en las decisiones debe seguir primando.