IAG se revaloriza un 35% sin síntomas de mal de altura

IAG lidera el rally de las compañías turísticas en bolsa, con un avance del 35% en lo que llevamos de año. Le sigue Meliá Hotels con una subida del 31%

El destacado rally que viven las empresas turísticas de la bolsa española no presenta indicios de mal de altura.  

Más bien al contrario, las principales cotizadas del sector se colocan, se mire el plazo que se mire, entre los valores más alcistas del IBEX 35

El líder del sector es IAG, que en esta sesión ha repuntado un 2,10 por ciento y eleva la revalorización en los que llevamos de ejercicio hasta el 35 por ciento. Meliá, tras subir en esta jornada un 1,14%, gana un 31 por ciento en 2023.

A continuación Amadeus, que tras avanzar un 2,42 por ciento, gana en enero casi un 19 por ciento. El cuarto valor es Aena, que suma un 17 por ciento este ejercicio, después de repuntar en la sesión de este miércoles un 2,84 por ciento.

De este modo, las 4 turísticas son las empresas que más suben dentro del IBEX 35.  Su subida es considerablemente superior al 7 por ciento que asciende el IBEX 35 en 2023. 

El turismo, uno de los sectores más interesantes 

Y es que el turismo ha sido señalado, junto con la banca, como uno de los sectores de la bolsa española con mayor interés en este momento.  

De hecho, se trata de uno de los favoritos de Santander Asset Management. 

“En España seguimos viendo potencial en ocio y turismo porque es el sector que más ha sufrido con el Covid-19 y donde todavía queda margen de recuperación”, contaba recientemente Lola Solana, responsable de pequeñas compañías en la gestora del grupo. 

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Aunque la actual recuperación tiene que ver, en parte, con el mal comportamiento que el sector desempeñó en 2022, con caídas del 23 por ciento para Meliá, del 18 por ciento para Amadeus e IAG y del 15 por ciento para Aena. 

De hecho, IAG es el valor de la bolsa española más operado por los bajistas. 

“El rebote viene condicionado por un sector que sufrió durante los últimos 3 años, pero las mejores perspectivas del turismo, con unos números que pueden acercarse a los previos al Covid-19, han provocado el impulso durante el inicio del 2023, también porque nos encontrábamos con cierta sobreventa en algunos valores”, apunta Diego Morín, experto de IG Markets. 

Si bien, la fortaleza demostrada por el turismo este verano (pese a que ya se notaba el mordisco de la inflación en el bolsillo de los españoles) y la expectativa de que la economía realice un aterrizaje suave, les están dando alas. 

La economía aguanta más de lo previsto 

Y los últimos indicios son positivos, en lo que respecta a la economía.

“En la zona euro, los buenos datos fortalecen las expectativas de evitar una recesión. El PMI compuesto de enero se ha situado en 50,2, ligeramente por encima de lo esperado y superando por poco la barrera de los 50, lo que indicaría una fase del ciclo económica expansiva”, explica el equipo de análisis de Portocolom AV.  

Otro catalizador al alza es la publicación de los resultados y guías para este año por parte de algunas compañías del sector, como Easyjet, que han disparado el resto de aerolíneas. 

En todo caso, conviene tener cuidado pues (suave o no) se avecina una ralentización económica, que puede ser la excusa perfecta para recoger posiciones y hacer caja tras los niveles de valoración alcanzados. 

“Los resultados por lo menos hasta el primer trimestre de 2023 van a ser buenos. Ya veremos más adelante, porque nosotros creemos que el entorno se puede complicar en algún momento”, decía recientemente Iván San Félix, analista de Renta 4. 

Cae el potencial de los valores turísticos  

Asimismo, el consenso de analistas también indica que el potencial de este tipo de valores se está reduciendo. 

Así, a IAG solo le queda un 4,2 por ciento hasta su precio objetivo de 2 euros; mientras que a Aena le queda el 4,5 por ciento (hasta los 145,51 euros); y a Amadeus el 5,4 por ciento (hasta los 61,58 euros).  

El caso de Meliá es aún más acuciante, pues su potencial se reduce hasta el 0,2 por ciento, con un precio objetivo de 6,13 euros.    

Así las cosas, parece difícil librarse de la incertidumbre, según Morín: “No sabemos con exactitud qué pueden hacer estos valores, ya que también veremos las proyecciones económicas que mostrará la próxima semana el BCE, con nuevas alzas de tipos y, sobre todo, las tensiones geopolíticas, otra piedra en el zapato para las compañías". 

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